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Pov narradora

Al ver los invitados que unos intrusos querían atacarlos comenzaron a entrar en pánico y corrían por todo el salón buscando una ruta de escape.

Peabody: ¡corran!

El canino tomó a ambos niños de las manos y los tres se marcharon asustados. Al ya haber estado en ese lugar y en esa época el señor Peabody sabía de un lugar en donde podían escabullirse y salir de el palacio sin ser vistos; asi que llegaron a la cocina de el palacio y salieron por una puerta que allí había. Corrían difícilmente entre la multitud de personas asustadas.

En un movimiento rápido uno de los intrusos que había atacado el Palacio de Versalles tomó bruscamente a Tim y lo arrebató de el agarre de el señor Peabody.

Tim: (asustado) ¡señor Peabody auxilio!

Sherman: (preocupado) ¡oh no capturaron a Tim y lo llevarán a la guillotina! ¡¿que hacemos señor Peabody?!

Peabody: ya sé, sigueme Sherman.

El perro junto con su hijo adoptivo se fueron del lugar mientras que en una carretilla el pequeño Tim junto con otras personas más estaban siendo transportados para tener un horrible final.

La carretilla llegó a el lugar, un verdugo sacó de la carretilla a Tim y lo colocó en la guillotina.

Robespierre: la reina y sus secuaces aristócratas deben pagar el precio por su gula, los sacrificaremos como los animales que son, empezando por este niño.

El verdugo iba tirando de una soga haciendo que la gran navaja se fuera alzando, Tim cerró los ojos para no ver su terrible destino hasta que sintió que alguien rápidamente lo tomó de su pierna derecha, no fue difícil zafarse de el agujero de la guillotina ya que su cabeza era pequeña, lo jaló para entrar en un agujero que estaba formado debajo de donde se encontraba él y entró rápidamente en una alcantarilla, allí estaban Sherman y el señor Peabody.

Peabody: rápido, vámonos antes de que nos encuentren.

Corrieron por aquellos lugares oscuros, tomaron un atajó hacia la derecha que el señor Peabody ya conocía a la perfección y salieron de las alcantarillas, ya no estaban en el pueblo sino en el bosque.

Tim: ¿como es que pudieron salvarme tan rápido?

Peabody: muy fácil Tim; Sherman y yo llegamos antes que ustedes, aflojamos una tabla que estaba justamente debajo de el sitio donde colocan a los que van a ser ejecutados, hicimos cuidadosamente un gran agujero que iba a estar debajo de tu cuerpo, al ver que el verdugo soltó la soga rápidamente tomé tu pierna, te jale para entrar a el agujero lo que haría que después estuvieras abajo de la plataforma y en segundos entraras a la alcantarilla y para aclarar dudas cuando tomé tu pierna rápidamente, arroje sin fallar un muñeco para reemplazarte que Sherman y yo hicimos, con una ropa idéntica a la tuya, relleno como el de los espantapájaros y un melón para ser la cabeza.

Tim: (sorprendido) wow es asombroso.

Peabody: no fue nada, solo un poco de ingenio basta para salvarte de perder la cabeza.

Sherman: jaja ¿osea como?

Las dos máquinas del tiempo se hicieron visibles.

Sherman: ¡vaya! que bueno que la primera máquina estaba cerca de la segunda todo este tiempo.

Peabody: Sherman como ya sabes conducir la máquina tú y Tim se irán en la primera y yo me iré en la segunda.

Sherman: esta bien.

Tim y Sherman se subieron en la primera máquina, el señor Peabody en la segunda y después de apretar botones desaparecieron para regresar a su tiempo.

Sherman x Tim | Del odio al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora