C a p i t u l o 2

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Pasaban los días para esta pequeña niña la cual parecía ser demasiado feliz en su primer año escolar, su cumpleaños estaba cada vez más cerca y estaba aún más emocionada por poder compartirlo con su abuela, no era favoritismo hacia ella, pero le tenía demasiado aprecio.

- ¡Es hoy es hoy es hoy! - la niña se despertó y de inmediato comenzó a brincar en su cama, en cuanto se bajó de esta corrió al cuarto de sus padres para poder compartir su emoción. - ¡Mami! ¡Papi! ¡Levántense es hoy! - se aventó en ellos para llamar su atención.

- Hey pequeña, feliz cumpleaños. - dijo un padre algo adormilado pero sonriente.

- Mi niña hermosa, ¿Estás feliz por hoy? - la mujer tomó a la niña en sus brazos para ponerla en medio se ella y así darse un abrazo de familia.

- ¡Si mami, hoy la abuela prometió acompañarme a la escuela! Ya quiero verla.

- Ay mi niña, estoy celosa de tu abuela. - tomó las mejillas de su hija y los apretó con delicadeza para terminar con un beso en la nariz.

- Por favor Yunseo, no crezcas. - esta vez su padre la tomo en brazos y la levantó de la cama para dar vueltas en sí mismo provocando risas en la niña.

- Bajemos ya bajemos ya! - no sabía cómo, pero la niña se le había escapado de sus brazos y cuando se dio cuenta ya estaba corriendo a la cocina para desayunar y poder prepararse para ese día.

El desayuno transcurrió normal, su abuela había llegado y la niña en cuanto la vio fue hacia ella. Mientras la niña estaba de espaldas abuela y madre se daban unas miradas disimuladas de disgusto, más por parte de la madre.

- ¿Lista Yunseo? - la mayor le habló para tomarla de la mano y abrir la puerta para salir a lo que la niña solo asintió.

- Adiós mami, adiós papi. - les dio un beso en la mejilla a ambos y salió de la casa. Como decidieron ir a pie en el camino venían hablando de cosas que se le ocurrían a cada una, se divertían de estar juntas gracias a esa conexión que tienen desde el primer momento en que se vieron.

- Y por eso le rompí su crayón abuela. - dijo la niña haciendo un puchero y cruzando sus brazos.

- Eso no es correcto Yunseo, si debes de defenderte, pero no era necesario romper algo que no te pertenecía, a la próxima que un compañero te moleste dile a tu profesora, ¿Entendido? - se incoó para estar a la altura de la niña para después revolotear ligeramente su cabello.

- Si abuela, lo prometo. - levantó su mano derecha y siguió hablando. - Me portare bien de ahora en adelante, te quiero abuela. - en cuanto dijo esto la abrazó con la poca fuerza que tenía.

- Yo tam...- la mayor iba a corresponderle, pero algo salió mal, ella comenzó a retroceder mientras tocaba su pecho en señal de dolor. - Yunseo...- fue lo último que susurro antes de desplomarse en el suelo, lo cual por obvias razones alarmó a la pequeña que no dudó en pedir ayuda.

- ¡Abuela! ¡Por favor despierta! No es hora de la siesta. - su voz parecía comenzar a quebrarse. - Ayuda por favor! ¡Mi abuelita se siente mal! - gente comenzó a acercarse por los gritos de la niña mientras que algunos les llamaban a emergencias otros ya estaban tratando de revisarla y los últimos trataban de cuidar a la niña que empezó a llorar al ver toda la escena.

Horas más tarde, la niña estaba dormida en la sala de espera del hospital junto con su padre que la tenía en brazos para que esta pudiera estar cómoda, la madre daba vueltas y vueltas por todo el pasillo demostrando desesperación, esperando noticias de su madre, estaba a punto de sentarse, pero de inmediato el doctor apareció.

- Familiares de la paciente Choi Jihyo.

- Soy su hija y él es mi esposo. - señalo a la persona sentada atrás de ella. - ¿Cómo está ella? - él se limitó a solo poner cara para indicar que no traía buenas noticias.

EL PODER VERTE (JK) COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora