002. Ando buscando un cabrón para partirle su madre

207 25 51
                                    

Hormonas.

Sus delgados labios chocaron contra los contrarios en un movimiento lento y terriblemente inexperto.

Su mano fue bajando por el hombro del menudo chico mientras sus bocas se abrían de forma graciosa y exagerada.

Cuando Román le ofreció ir a jugar Gta a su amigo Tadeo, jamás imagino terminar en una situación así.
A él le gustaban las niñas, no el niño al que consideraba como su mejor amigo.

Sus cuerpos fueron rompiendo la distancia en un interminable contacto, torpe. Sus manos sudaban mientras apretaban sus ojos fuertemente.

Para Tadeo este era un sueño hecho realidad.

Todas las noches, antes de dormir, se persinaba pidiéndole a San Antonio que le cumpliera el milagrito.

Separaron sus rostros conectando miradas, el sonrojo en sus mejillas denotaba lo avergonzados que se sentían. Porque a pesar de estar encerrados en la habitación del dueño de la casa, esa sensación de miedo e incomodidad se acumulaba en su estómago.

Tadeo lo llamaba mariposas; Román que la tortita de huevito que se desayuno le había caído mal.

Las manos del más joven tomaron el rostro del contrario abriendo la caja de Pandora, sus labios volvieron a unirse de una manera más intensa, cada vez más hambrientos.

No querían despertar. Que por favor la alarma no sonara en ese momento.

Estaban tan metidos en el beso que no se dieron cuenta cuando la puerta principal fue abierta, ni mucho menos de la voz insistente de Jimeno en la cocina.

Esa tarde, Jimeno se había ido al tianguis muy temprano para hacer las compras. Es por ello que no espero a su hermano para ir juntos, quería llenarle el frutero y darle una sorpresa para cuando llegara de la escuela.

Pero la sorpresa se la llevó él cuando lo encontró en un intenso beso con Tadeo, el hermano de su mejor amigo.

-¡En mi propia casa, Román Humberto!.

Ambos chicos se separaron rápidamente mirando a la puerta.
El joven muchacho los miraba intensamente con la boca y los ojos abiertos de par en par y una chancla en la mano.

Según, Sergio no les afectaba, pero les estaba pegando sus mañas.

Sentó a ambos jovencitos en la sala mientras caminaba de un lado a otro por la pequeña casa tratando de calmarse. Pero sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando escucho gritos en la calle.

Se apresuró a abrir las cortinas en la ventana, trató de hacerlo lentamente para no llamar la atención, pero a su hermano le valió y las abrió de par en par con su acompañante mirando hacia la calle.

Cristofer y Agustín se gritaban con hartas ganas mientras Giovanni agarraba a Juan Cuco.

Todo el barrio andaba de chismoso mientras los miraban esperando putazos. Jimeno se bajó corriendo con el alma tendiendo de un hilo, ¿es que acaso no podía tener un día normal?.

-Iras carnal, con mi bro no te metes. Te metes con uno y se la pagas a todos- Dijo Agustín con un tono ñero moviendo un desarmador.

✨AVENTURAS 3ERMUNDISTAS DEL KPOP✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora