Todo era mejor cuando solo escribía, cuando solo me encontraba inundada de falsas ilusiones que me vendían páginas y no destellos. Siendo ajena a las decepciones de la vida, aquellas que son fuertemente desgarradoras ante su presencia. Donde el amor, era un cuento de hadas, par de miradas, besos y promesas; cuando en realidad es la agonía de corazones, un sentimiento lleno de expectativas y decepción. Donde los te amo, se dicen por cumplir y no por sentimiento. Donde para amar y ser amado, debes mirar a tu entorno, mirar si eres el único que ronda su pensamiento o hay más destellos en su mente. Donde piensas que eres querido pero en realidad es la confusión dueña de tus pensamientos. Todo era mejor cuando no había amor de por medio, cuando no habían personas de por medio; solo las páginas y yo. La sincronía de mis palabras y mi pensamiento, escribiendo para mi y no de mi. Pero aquí me encuentro, débilmente decepcionada, pero feliz. Pues a pesar de las heridas que traen consigo la vida, he aprendido de ellas. Aprendido que el amor es tan complicado como ejercicios matemáticos pero tan esperado y querido. Que somos masoquistas, pero, es gratificante. Sentir amor mientras dure es una de las cosas más especiales que el mundo pudo traer, como también, la más desgarradora.
Pero, ¿Quién soy yo para hablar de amor? Una chica inexperta, pero experta en ser decepcionada. Una chica incapaz de brindar lo que todos quieren, pues tiene miedo a cometer errores. Solo conociendo el amor en novelas engañosas, cautivando sus sentidos solo con mentiras. Dime, ¿quién soy yo para hablar de amor? ¿Quién soy yo para hablar de decepciones? Pues por más que no quiera aceptarlo, me busco las decepciones. Pues sé cómo terminará pero no quiero creerlo, siempre habrá una esperanza, un pensamiento que me obliga a creer que todo estará bien, qué hay amor de por medio, pero no, no lo hay. Y quiero pedirme perdón, por tener falsas esperanzas, falsas ilusiones. Perdón por ser yo, por ser curiosa, graciosa, tonta y difícil de bregar. Perdón por ser yo. Pues todo era mejor cuando solo escribía, cuando escribía para mi y no de mi.
En cambio, aquí ando, esperando algún día sentir aquel amor. Pues al final, ¿qué somos sin él? No morimos sin él, pero es una sensación protectora y dulce al corazón. Llena de decepciones, lágrimas, sonrisas; amor. Pero no es cualquier destello aquel listo para ese vínculo al alma. No todo ser anda listo para amar y ser amado, como también, hay quienes no saben que es amar y ser amado; aquellos que solo se dedican a jugar libre con el alma mientras lastiman las entrañas del corazón. Todo era mejor cuando no conocía esta parte del mundo, cuando simplemente fantaseaba con él, teniendo grandes expectativas a lo que sería. Obteniendo la igualdad a la desgracia. Donde la guerra es entre nosotros mismos y nuestras mentes. Peleando por las decisiones que tomamos a la ligera, y las decepciones que conseguimos consiguiente a ellas.
- Con cariño, Anie
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Con cariño, Anie🍁
Документальная прозаSon escritos del alma, detonando en ellos verdadera sinceridad. Siendo una historia de amor camuflajeada en pequeñas dosis de pensamientos. Es un amor ingenuo e inocente despechado por el entorno del mundo. Son las palabras de un ser tan enamorado...