Capítulo 8

562 72 7
                                    

Yuri despertó muy confundido de donde estaba, miro a todos lados pero no había nadie en la habitación. Trato de levantarse pero aun se sentía mareado, solo dio un par de pasos antes de caer al suelo de rodillas, miro hacia un lado observando un sofá a su lado, gateo hasta el y se sentó. Unos momentos después apareció Otabek con una botella de café helado en las manos.

—Yuri...¿te encuentras bien?— pregunto preocupado acercándose.

—Si...estoy bien aunque un poco mareado— respondió subiendo sus pies para abrazar sus rodillas.

—Debiste haberte quedado en la cama...toma bebe esto— dijo sentándose a su lado y dándole el café, Yuri bebió de el y luego lo puso en la mesa.

—No tenías porque beber descontroladamente...parece que no toleras bien el alcohol— dijo el alfa riendo.

—No es que no lo tolere...ha pasado mucho tiempo desde que salí a beber con alguien y estaba un poco emocionado— respondió el omega frotando sus ojos.

—¿No sales con Viktor o Jean?— pregunto sintiendo un nudo en el estómago.

—No...ellos tienen sus propias vidas y yo la mía, de por si nunca he salido mucho, si bebo lo hago solo en mi casa— dijo suspirando, Otabek pudo notar la soledad que transmitían esas palabras y sintió un dolor en el pecho.

—Puedes salir conmigo entonces...solo dime cuando quieras y estaré para ti— respondió sonriendo tiernamente, Yuri lo miro unos segundos y sintió ganas de llorar, desvió rápidamente la mirada para evitar que Otabek lo mirara de esa forma.

—Vi lo que Lydia hizo en el bar...creo que me sentí un poco ansioso de que hablaras con ella— dijo quedándose callado de inmediato, odiaba el hecho de que se volvía mucho mas honesto cuando estaba ebrio.

—Pensé que no te habías dado cuenta...no es lo que piensas— respondió rápidamente un poco nervioso.

—No...vi lo que paso así que no te preocupes, solo me puse nervioso de lo que pudiera decirte sobre mi— se rio un poco nervioso.

—No escuche nada de lo que me dijo...te lo dije antes, solo creeré en ti— dijo tomando su mano.

—Eso es un alivio...no quisiera que tuvieras una mala imagen de mi— respondió el omega sonriendo tiernamente.

—Nunca podría ser así...ante mis ojos eres la persona mas perfecta del mundo Yuri— dijo acariciando su mejilla.

—Eres la persona mas genial, divertida, inteligente y la mas hermosa que he visto en mi vida— ambos se miraron a los ojos durante unos largos segundos hasta que por fin cortaron toda distancia y se unieron en un beso.

Comenzó siendo un tierno y tranquilo, igual al que siempre se daban cuando estaban frente a todos, pero en el momento en que Yuri enredo sus brazos en el cuello del alfa, aumentaron la intensidad. Otabek lo tomo de la cintura pegándolo mas a su cuerpo colocándolo debajo de él, Yuri paseaba sus manos en toda la espalda del pelinegro atreviéndose a tocarlo por debajo de la camiseta.

Se sentía bien, demasiado bien cuando Otabek comenzó a acariciarlo metiendo sus manos por debajo de su ropa, ahora los besos los estaba dando en su cuello. Yuri cerro los ojos por inercia, era la primera vez que alguien lo acariciaba y besaba de esa manera, la primera vez que estaría con alguien y hubiera sido así de no ser porque escucho aquel susurro en su oído.

—Yuri...te amo...— confeso el alfa mientras continuaba besando su cuello.

—¡No!— interrumpió abruptamente el omega empujándolo y haciéndolo caer al suelo, ambos se miraron, respirando por la boca tratando de controlarse.

SerendipiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora