Psicólogo [Luzuplay/Loliplay]

18.Ciclo

Para Lolito, mantener alejado al bartender de Raúl fue demasiado sencillo aunque nada placentero, el hecho de que aún puedan interactuar le molestaba profundamente, pero no podía hacer nada, debía mantener un perfil bajo ante David Romero y por sobre todo ante el castaño, no quería hacerle daño, no quería hacerle daño, no quería hacerle daño ¿verdad? ¿Verdad?

Su mente otra vez jugaba con él, sus extraños fantasmas retorcían su razonamiento y hacían que Raúl se viera como una rata traidora, sus pensamientos que lo inundaban fueron abruptamente interrumpidos por el sonido de la puerta, el psicólogo había llegado temprano.

-Hola, Loli- Raúl le sonrió al ojiverde este lo miró extraño -¿Pasa algo?-

-No, nada Raúl- el peli naranja no cambiaba su expresión -es solo que me preguntaba ¿por qué sigues siendo tan amable con ese niño? ¿A caso lo nuestro no es importante para ti?-

Ambos chicos en ese tiempo que pasó Auron desaparecido comenzaron un extraño romance, romance que tenía unos extraños momentos, momentos donde todo estaba fuera de control.

-Manuel ya hablamos de esto- el castaño respiró profundamente y comenzó a dejar sus cosas en su lugar -no comencemos un drama esta noche-

-No te diría esto si tú vieras lo que veo, ese chico tiene malas intenciones contigo- Lolito comenzó a dejar que sus demonios actúen -¿a caso eres estúpido? No quiere nada de ti, nadie quiere nada de ti porque eres una gran basura, estoy aquí contigo porque soy la única persona capaz de ver lo que eres.

-Manuel, basta- la tensión en el ambiente iba en aumento -no comiences con esto otra vez-

-Solo quiero que comprendas que eres una maldita esco...-

-¡Maldita sea!- Auron interrumpió al peli naranja de golpe -Una mierda Manuel, me voy-

Lolito vio como Raúl tomaba su abrigo y se iba azotando la puerta al salir ¿por qué decía todo eso? ¿Por qué se empeñaba en hacerle daño a Sergio? El ojiverde solo suspiro, debía disculparse por haber soltado esa mierda por gusto.

[...]

Eran tarde por la noche y Auron al fin volvía, este tenía una mirada triste.

-Raúl, lo siento mucho- Manuel se levantó del sofá y se paró frente al castaño -todo lo que dije es solo mierda sin sentido-

-Lo sé-

Ambos se abrazaron y besaron con pasión, reiniciando así el ciclo sin fin de aquel agridulce tormento