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"Ya estoy lista cariño... ¿Qué traes en las manos?"

Tras escuchar la voz de su novia, Jayden se dio vuelta solo para apreciar el bello vestido que llevaba, el cual era de color blanco con detalles lila y un solo tirante del lado izquierdo. Luego de unos segundos de admirar su belleza, recordó lo que llevaba en las manos y...

"Nada... no es nada cielo..., pero que hermosa te ves, ese vestido realmente te hace justicia..." dijo un poco nervioso porque creía que Mia vio el 'regalito' que su cuñada le dio a Jayden.

Luego de ese pequeño "incidente", decidieron salir del penthouse para emprender su rumbo hasta el lugar donde se llevaría a cabo su tan esperada cita de aniversario. Tras unos minutos de espera, justo frente a ellos apareció una carroza jalada por caballos.

"¿Amor? ¿Pero qué?" No había duda, sin duda esta pequeña sorpresa la había dejado sin palabras.

"Bueno, lo que sea por mi amada princesa ¿Me permites?" Y así Jayden, haciendo gala de su caballerosidad, le abrió la puerta de la carroza y le ayudó a entrar para luego entrar él y que diera inicio su recorrido.

El paseo fue hermoso, de eso no había duda, pasaron una largo rato dando vueltas de aquí a allá por todo Briarwood, intercambiando algunas palabras de amor, hasta que por fin habían llegado a su destino, el cual era uno de los restaurantes más lujosos del lugar, en el cual festejarían su aniversario.

Tan solo al entrar, se dieron cuenta que era un lugar de súper lujo, decorado de una forma que si bien, no era banal ni exagerada, bien podríamos decir que era casi minimalista. Había poca gente, la luz era tenue, y con una música suave de fondo, la feliz pareja fue llevada a su mesa, la cual se encontraba en el segundo piso, justamente en el balcón del mismo, el cual les permitía tener una visión detallada tanto de la ciudad como del hermoso cielo nocturno que les ofrecía Briarwood. Tras unos instantes, los meseros llegaron para tomar las órdenes de nuestros protagonistas, a lo cual, estos aclararon que podían ordenar lo que quisieran, ya que todo estaba cubierto por Vida. Luego de ordenar su comida, y por parte de Mia, también ordenó algo fuerte para beber, específicamente, champagne.

"Vaya, no sabía que te gustaba ese tipo de bebidas." Aclaró su novio con cierta inquietud.

"No te preocupes cariño, es solamente por la ocasión, yo sé de sobra que no bebes, pero creo que por esta vez, no hará daño" dijo ella para calmarlo.

"Creo que tienes razón por esta vez y por lo que se está festejando, supongo que podemos dejarnos llevar."

Y así luego de un momento, un mesero les había llevado su bebida junto con unas copas, para acto seguido, proceder a servirselas. Media vez estaba todo servido, decidieron hacer un brindis por su felicidad y que esta durara por siempre, y así tras cruzar sus brazos, procedieron a beber de sus respectivas copas.

"Es un poco agria esta bebida ¿No crees?" Cuestionó Jayden.

"Claro, pero no te preocupes, eso pasa porque es la primera vez que bebes de esto, el primer trago siempre es el más amargo, pero luego no sabe tan mal."

Luego de eso, sus platillos fueron servidos y la pareja comenzó a engullir su comida. Ambos estaban maravillados por lo bien que sabía su comida, sobretodo Mia, a tal punto que pensaba en pedir la receta de los platillos que pidieron, pero se abstuvo, ya que estaban ahí para descansar del trabajo, no para pensar en este.

La cena transcurrió tranquila, en silencio, nuestros protagonistas apenas y cruzaron palabra, pero estaba bien, no era incómodo, incluso lo disfrutaron, sobretodo Jayden, que, a pesar de sus nervios, pudo mantener la calma, incluso dicho silencio le fue de ayuda para que pudiera relajarse.

DESEO: MÁS ALLÁ DE LOS SENTIMIENTOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora