7. Por los reencuentros

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PDV. HARRY

- He conseguido concretar una cita con Louis- me dice Amanda, haciendo que la mirase rápido- de seguro los nuevos van a alucinar, y él dice que no tiene ningún problema.

Había pasado una semana desde que le vi por última vez, y no quería verle seguidamente, básicamente porque a Oliver no le haría gracia.

- ¿Supone algún problema? Si quieres le llamo y-

- No, tranquila. Es bueno para el estudio que vengan modelos como él.

- ¿Seguro? No quiero que sea incómodo para ti.

- No lo es- le aseguro, sonriéndola- ¿cuándo viene?

- Esta tarde.

Asiento, metiéndome en le despacho para mandarle los nombres de los nuevos alumnos a Cintia.

Louis y yo tenemos una historia, pero eso no quiere decir que no podamos tener una relación cordial. A fin de cuentas, en el fondo, le tengo demasiado cariño por todo lo que vivimos.

Mi teléfono comienza a vibrar, mostrando el nombre de Oliver.

- Hey- saludo, terminando de enviar el correo a Cintia, cerrando el ordenador.

- ¿Te pillo liado?

- No, le estaba enviando unas cosas a Cintia. Hoy no fotografío, tengo a los demás aquí.

- Genial, porque esta tarde te la coges libre.

- ¿Y eso?- frunzo el ceño, apoyándome en el respaldo de la silla, mirando por la ventana.

- He conseguido entradas para el musical Chicago- dice contento- no sabes lo que me ha costado, pero he movido algunos hilos y... ¡tachan!

Muerdo todo mi labio inferior, maldiciendo.

Era un plan que llevábamos planeando desde hace años. Podría decir que es uno de los mejores musicales que existe, al cual he soñado mil veces que iba, pero esta tarde no podía faltar.

- ¿A qué hora es?- pregunto, mirando mi agenda.

- A las ocho.

Amanda había concretado la cita con Louis a las cinco. Si todo salía bien, me daba tiempo de sobra.

- Vale, genial- sonrío- ¿quedamos en la puerta a las siete y media?

- Pensaba que iríamos juntos.

- Es que tengo unos asuntos antes. Iría directo para allá.

- Yo estaré antes para no pillar mucha cola.

- Genial- respondo- ¿vienes a comer a casa?

- Hoy salgo a las cuatro, así que ya nos vemos allí.

Asiento, levantándome de la silla.

- Nos vemos esta noche- me despido.

- Te quiero.

- Y yo- susurro, cortando la llamada.

Las cosas con Oliver estaban mejor que nunca. Los dos estábamos haciendo un esfuerzo para entendernos, confiando el uno en el otro, como una pareja normal.

- ¿Me necesitáis o puedo irme?- le digo a Amanda, la cual se encuentra en la recepción.

- Puedes irte- sonríe- lo tenemos todo controlado.

- A las cuatro y media estaré aquí.

Asiente, despidiéndose de mí.

No podía evitar que los nervios me comiesen por dentro. Últimamente me pasaba cada vez que veía a Louis, pero no era nuevo. Era la misma sensación que viví hace unos años atrás.

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