Marauders: Erasmus bois

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Dedicado a @ClaraLunaMoony y su insistencia, paso de volver a prometer nada que luego me arrepiento JAJAJAAJ

Es la primera vez que escribo contenido erótico sin que sea de coña, me da mucho cringe, no me juzguéis mucho porfa xD

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Por fin llegaron las vacaciones de verano, el erasmus había acabado pero estaban muy decididos a no marcharse tan pronto, con el covid no habían podido disfrutar apenas de España y sus costas, y eso era muy injusto. Habían decidido que en septiembre todos encontrarían trabajo de cualquier cosa, lo que fuese menos volver al Reino Unido tan pronto.

Lily, Mary, Dorcas y Marlene habían decidido mudarse también a Alcalá de Henares. Lily quería estar todo lo cerca posible de James, aunque jamás lo reconocería en voz alta por puro orgullo, y por supuesto James y Peter estaban contentísimos con esta noticia. 

Sirius, que había conseguido gran fama en twitter España, conocido como "el guiri que se caga en todo", decidió abrir comisiones de dibujos para así ganar un dinero extra aprovechándose de su popularidad creciente, y Remus, a la vez que trabajaba en una pizzería que estaba debajo de su casa, abrió una tienda en Etsy donde vendía jerseys tejidos a mano mientras buscaba trabajo de traductor. 

Peter se había metido en un curso de comida española y ahora vendía croquetas a domicilio o recogida en mano, y a James le habían cogido de un equipo de fútbol para entrenar a los alevines. Todo estaba aparentemente bien, y eso, en tiempos de pandemia, es algo difícil de decir. 

Remus a veces tenía recaídas, a veces eran recaídas ligeras, otras eran mucho más fuertes, semanas de no poder salir de la cama porque la cama era el único lugar dónde podía sentirse a salvo. El covid le había pasado factura, siempre en casa, sin poder salir de sus pensamientos recurrentes sobre Fenrir, las pesadillas que a veces iban a más e incluso le hacían dudar hasta qué punto era ficción y no estaba pasando en realidad cuando se despertaba lleno de arañazos y moratones causados por sus propios mordiscos. 

A menudo se planteaba dejar la relación con Sirius, le quería, querría pasar ocho vidas con él, pero joder, es que sentir cosas duele tantísimo que cómo gestionarlo cuando dentro solo hay dolor. Sirius siempre le dice que es idiota por pensar en esas cosas, pero estaba seguro de que algún día se cansaría de repetírselo y ahora ese era otro gran miedo. 

Cuándo Sirius iba a aburrirse del débil y frágil Remus. 

Sirius sin embargo pensaba que jamás se cansaría de cuidar a Remus, porque si le necesita, él iba a estar a toda costa. Cuidar a Remus era una prioridad para él. Le daba igual que no le dejase acercarse, o que llevasen dos meses sin follar, lo que le importaba era que poco a poco fuese a mejor. Y si eso implica tener que bajar diez veces a la semana a por chocolate, pues eso haría. 

Pero toda esa tristeza se disipó un poco cuando un día, entró a su habitación James con toda esa emoción desmedida que le inundaba cada vez que algo le hacía especial ilusión. 

— Remus, Remus, sé que no estás en tu mejor momento, y lo último que quiero es molestarte pero necesito contarte esto, porque es algo muy importante para mí y que a ti indirectamente te afecta... — Remus, que estaba tumbado en la cama se incorporó un poco, definitivamente ese charlatán había captado su atención, le miró inquisitivamente. — Vale, vale, al grano, lo pillo... ¡QUIERO PEDIR MATRIMONIO A LILY!

Las mejillas de James se enrojecieron furiosamente, era lo más parecido a pedirle la mano a los Evans que pensaba hacer jamás, y sin embargo, nada le ponía más nervioso que el hecho de que su amigo, que era algo así como su hermano, no aceptase que él, que según él mismo era un gilipollas redomado, quisiera casarse con la perfecta Lily.