Primer Capítulo.

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Caminábamos por las calles de Chicago, la idea era llegar hasta Alex's Café antes de tuviésemos que volver al instituto.
Al ser hora del almuerzo tenías la ligera libertad de salir del instituto por tu almuerzo, o quedarte en el edificio comiendo lo que el instituto te ofrecía gratis.
Y tanto Krista, Isis, Hermonie como Ruth y yo nos negábamos rotundamente a probar bocado de aquel lugar.

La campanilla ubicada estratégicamente en la entrada de la cafetería anunciaba nuestra llegada a los presentes, algunos curiosos levantaron la vista mientras que otros continuaban en lo que fuese que estuviesen haciendo.
Nos ubicamos en nuestra mesa de siempre, esta cafetería nos había acogido a todas desde primer año de secundaria.
Ordenamos un café para todas, opte por avanzar el nuevo libro que Agatha; mi mejor amiga se había encargado de obsequiar.
Agatha vivía algunas seis calles más abajo del instituto, pero sus padres la habían "encarcelado" como ella dice en una "patética secundaria privada para bastardos inútiles y demás ricachones", el nuevo libro se titulaba: "El chico que se escabulle por mi ventana", según Agatha era uno de los mejores libros que ha leído y por mi suerte estaba a punto de descubrirlo.
Las chicas se habían sumergido en alguna especie de conversación que aún no lograba entender, pero supongo que me enteraría luego.
Ruth se había desesperado y había decidido pararse en el mostrador de la cafetería para atacar al pobre entregador de órdenes.

-Gabrielle, podrías dejar el libro a un lado, estamos en una conversación importante, de la que deberías ser participe-me llamo Krista.

-Oh lo siento, ¿Qué sucede? -pregunte distraída.
-Isis está a punto de contarnos todos los detalles acerca de su cita con Douglas- comento entusiasmada Krista nuevamente.
-Bien, primero me paso a buscar en el convertible de su hermano Nate, me llevo hasta uno de esos restaurantes en medio de la ciudad con faroles y una increíble cena, al final salimos por una vuelta al muelle- dijo Isis con cierto aire de enamorada.
Le gustaba Douglas desde que tenía memoria y había estado esperando por un momento como ese desde tiempos remotos.

Una vez me asegure que estuviesen demasiado distraídas con la historia decidí volver a concentrarme en mi libro, no iba muy bien pasando de página cuando la estruendosa risa de Ruth retumbó mis oídos.
Alce la vista y la encontré hablando con un chico, le daba aquella clase de mirada que conocía bastante bien.
Lo observaba directamente a los ojos cuando este hablaba, y una vez era su turno de hablar baja la cabeza.
Hoy estaba en su papel de: "Me gustas pero soy increíblemente insegura" que no le lucía en lo más mínimo.
Continuaba observándolos sin poder creerlo, cuando la mirada del chico choco con la mía, baje la cabeza inmediatamente e intente volver a concentrarme en el libro, pero el continuaba en mi cabeza, como un mal sueño, de esos que te persiguen todo el día y se van cuando vuelves a dormir.

-Chicas, el es Jov- escuche la chillona voz de Ruth.

Levanté la mirada de mi libro y volví a encontrarme con el chico.

-¿Quien es ella?-escuche como Jov murmuraba.

-Oh, ella es Gabrielle, una amiga-dijo Ruth restándole importancia.

-Gabrielle, soy Jov -se presentó.

-Un gusto Jov- dije lanzándole una sonrisa tímida y volviendo a mi libro.

Una vez Jov se había retirado, Ruth volvió a su asiento.

-No me van a creer quien consiguió el número de ese chico tan guapo-anuncio entusiasmada.

-Tu- respondió Hermonie emocionada.

-Exacto, y fue lo más sencillo, les cuento, mientras apuraba a Tyler; el cajero, un chico iba llevando su capuchino al contenedor de basura, pero justo cuando iba a entrarlo choqué con el y el capuchino término derramado sobre mi, claramente tenía ganas de dejar sin hebras a quien fuere que hubiese hecho aquello, pero una vez note que era así de guapo, decidí controlarme-contó Ruth.

Krista chilló emocionada.

-Viste como te miraba, creo que de verdad le gustas-comento Isis.

-Como va a gustarle si acaba de conocerla- respondí yo.

-Al parecer lo hace, no tienes por que desquitar conmigo el que no tengas a nadie-respondió Ruth en autodefensa.

Normalmente siempre actuaba así, a la defensiva.

Revolví los ojos.

-No me estoy desquitando contigo, sólo digo lo que es obvio, acabas de conocerlo, ¿Qué pretendes? -pregunte irónica.

-Pues si, intercambiamos números -ignoro mi comentario dirigiéndose a las chicas.

Revise la hora en mi reloj, las once cuarenta y cinco, era momento de volver.

-Se acabó el almuerzo, debemos irnos- anuncie mientras tomaba mi libro y demás cosas.

Todas imitaron mi acción y abandonamos Alex's lo más rápido que nos permitimos.

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Kristina Bazan como Gabrielle Eastman en multimedia.

Gabrielle & Jov.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora