Inesperado (Chad x Ryan)

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Terminó el juego con el que los wildcats decidieron aceptar que Ryan dirigiera su número musical.

—Hey, Evans, ¿no vas a ducharte? -preguntó Chad, cuando Ryan hizo el gesto de dar media vuelta.

—Claro -replicó el aludido—. En la ducha de mi cabaña.

—Entiendo —dijo Chad, fingiendo estar indignado—. Ve a tu ducha privada para que no tengas que mezclarte con los sirvientes...

—No es eso —se defendió Ryan, riendo nervioso.

—¿Ah, no? —preguntó Chad, como retándolo a dar una mejor razón.

—Chad, en general los hombres hetero —explicó— no se sienten cómodos estando desnudos cerca de mí...

—¿Qué quieres decir? —preguntó Chad mirándolo confundido.

—Chad... soy gay —dijo, sin acabar de creerse que el chico no lo supiera.

Chad se rio.

—¿Y qué? —lo tomó del brazo—. Vamos...

—Pero...

—Anda —lo animó y se lo llevó a rastras a las duchas comunitarias.

***

En cuanto entraron al vestidor, todos miraron a Ryan y se hizo un silencio incómodo. Algunos de los chicos que estaban en parte desnudos, volvieron a vestirse y salieron rápidamente. Otros que estaban bajo las regaderas, salieron y comenzaron a vestirse todavía escurriendo. Chad actuaba como si nada raro estuviera pasando, hablaba y bromeaba animadamente con quienes estaban cerca, mientras empezaba a quitarse la ropa. Abrumado, Ryan se desnudó y se colocó bajo una regadera, miró directamente los azulejos de la pared para evitar que a nadie se le ocurriera que estaba espiando, y comenzó a bañarse con movimientos mecánicos.

—Hey, ¿a dónde van? —protestó Chad—. ¡No sean ridículos!

Ryan miró sobre su hombro y se dio cuenta de que todos los chicos estaban huyendo.

—¡Te lo dije! —dijo, riendo, como para restarle importancia, pero no pudo ocultar su amargura. Cerró la llave y se dispuso a secarse. Chad lo imitó. Se sentía culpable de que estuviera herido y empezó a bromear con él para animarlo. Tomó los pantaloncillos de Ryan y se los puso.

—¿Cómo me veo? —le preguntó.

—¡Dámelos! —le dijo entre risas, pero Chad se negó y se probó su playera.

—Me queda muy bien, ¿verdad?

Ryan se doblaba de risa.

—¡Devuélveme mi ropa!

Chad movió la cabeza a los lados.

—Me queda mejor a mí, estoy seguro —le dijo y se puso el calzado de Ryan. Finalmente se tocó la cabeza con su gorro—. ¿Qué opinas? Ryan negó con la cabeza, riendo.— Nos vemos luego —dijo y salió corriendo.

—¿Qué...? ¡Chad! —le gritó, pero el chico no contestó. Dejó pasar unos minutos, pero se dio cuenta de que Chad no tenía intención de volver, así que se puso la ropa que había dejado en la banca, y salió del vestidor. Chad lo esperaba afuera.

—Estás loco...

—¿Una hamburguesa?

Ryan asintió, sonriendo.

***

La imagen usada en la portada es una creación original. La pueden buscar en mi instagram si quieren darle amor 😊

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