Aina
Siempre e tratado de evitar estar en este tipo de situaciones con todo el mundo, mas si se trata de hombres, odio estar cerca de ellos y sobre todo odio que cruzen la línea imaginaría que yo dibuje alrededor de mi, desde que Kilian y Greg comenzaron a hablarme les deje claro que no se acercaran a mi, obviamente ellos jamas respetaron eso, al principio me molestaba de una manera exagerada, pero de un tiempo para aca eso a ido cambiando, Greg me abraza y ya no me molesta tanto de echo lo estoy considerando como a un amigo pero el problema ahora es Kilian de ellos dos es el que me molesta menos su cercanía, puedo estar con el casi olvidándome de todo y eso no esta bien, y no lo digo por mi si no por el
Ahora mismo esta frente a mi con su cuerpo completamente pegado al mio mirándome de una manera diferente una vez mas, conozco esa mirada y una de las personas que me ha mirado de esa forma es Marcus, mis nervios aumentan y suspiro, Kilian me levanta el rostro para mirarlo aun mas y susurra
-Tranquila Aina... solo quería decir.... bueno gracias por ayudarme.... ya sabes a limpiar mis manos
Comienzo a reír nerviosa
-¿Me tienes asi solo para decirme eso?
El comienza a reír y comienzo a reflexionar lo que acabo de decir, me doy cuenta que lo dije como si esperara algo mas de esto y no es asi, mis malditos nervios hacen que diga tonterías, impulsivamente recargo mi frente en su hombro para esconder mi vergüenza y comienzo a reír
-Tal vez.... no me explique bien, lo que trataba de decir era que no es necesario que te acercaras tanto a mi, puedes agradecerme sin tener que estar de... esta forma
El esconde su cabeza en mi cuello y respira profundamente
-Lo se... solo que siempre huyes y esta vez no queria que lo hicieras
Ambos nos quedamos en silencio, el deposita un ligero beso en mis cicatrices y de cierta forma me molesta y me hace sentir muy incomoda, el se aparta de mi y me toma de la mano, ambos salimos del baño y sin decir nada desaparece de la habitación, suspiro cuando no esta y me siento en el borde de la cama, aveces siento que necesito alejarme de todos, quiero estar acompañada de mi soledad aunque aveces ella deje entrar los malos recuerdos y me haga querer hacer locuras como querer dejar de existir,
Algo hace que me levante y entre en el baño me detengo en el espejo y comienzo a ver mis cicatrices, el dolor regresa a mi, comienzo a escuchar a mi madre diciendo "Solo eres un objeto que solo sirve para una cosa" los recuerdos vienen a mi uno por uno, dolor y más dolor, gritos y sufrimiento, mis ganas de ya no vivir están aquí, en ese instante mi corazón se acelera y cierro los ojos necesito encontrar la calma, necesito no pensar en nada, la puerta del baño se abre y escucho su voz
-Aina... ¿Estas bien?
Abro los ojos y corro hacia Kilian, lo abrazo con fuerza y me aferro a el, el me rodea con sus manos y si decir nada me deja llorar en su pecho
No se cuanto tiempo paso, ni siquiera se como termine sentada en las piernas de Kilian, yo aun estoy aferrada a el, el esta sentado en su cama mientras acaricia mi cabello, regreso a la realidad y le susurro
-Lo lamento... no se que...
-Shhh... no tienes nada que lamentar Aina.. todo esta bien ahora
Abro los ojos y veo que tiene algunas cobijas en el suelo, siento pena por el ya que por mi tendrá que dormir en el suelo, levantó la mirada y sin pensar me dirijo a el
-No duermas ahí... duerme con migo
Se que no es lo correcto, se que no estoy pensando pero no quiero dormir sola, no hoy, el me mira por un instante y sonrie levemente
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¡Esa enana es mía! *En Edición*
Roman d'amourKilian era el tipico chico popular y capitan del equipo de futbol de 21 años que salia con Tania una de las animadoras de la Universidad Delante de todos era un chico engreído pero lo que nadie sabía era que el tienia un pasado doloroso y un hermos...