¡Esa enana es mía! *En Edición*

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Kilian

Mi hija es lo único que amo en este mundo, me gusta hacerla feliz pero cuando me hace besar a Aina es un poco incomodo apesar de que solo la beso en la mejilla, sus ojos gris tienen algo, simplemente me pierdo en ellos y me hacen regresar cuando se que me fui lejos.

Decidí que al llegar a mi trabajo dejaría de pensar en lo que ocurrio hoy, quiero olvidar la forma en que reaccione con Paulina,quiero dejar de pensar en el momento en el que pege mi frente con la de Aina pero sobre todo quiero olvidar la manera en la que ella acariciaba mis mejillas para tranquilizarme

-Mierda...

Sacudo mi cabeza para que todo se valla y comienzo a trabajar, hoy es sábado y es cuando más lleno esta el lugar, preparo bebidas y ayuda a sacar al típico borracho que hace pleito, las chicas llegan, me coquetean como siempre y una señora mayor de la nada me entrega un papel, se acerca a mi y me susurra al oído

-Llamame guapo

Cuando se aparta me guiña un ojo y se va no sin antes dejarme una muy buena propina, tomo el dinero y tiro la hoja con su número.

Lo que mas me gusta de los sábados es que la noche termina rápido, cuando terminamos dejamos todo en su lugar, Sam me entrega mi sobre con dinero y me despido de el, pido un servicio de taxi para regresar a casa, me negue a seguir usando la camioneta Aina ella se molesto pero al final lo entendió

Llego a casa a las 6 de la mañana, subo cansado y abro la puerta de la habitación de Romina ella duerme y veo que Aina no esta, al darme la vuelta para buscarla doy un mal paso y para no caer busco de que sujetarme y termino agarrando a Aina quien al ver que voy a caer intenta ayudarme pero es inútil por que al final termino en el piso y lo peor es que caí encima de ella dejándonos en una posición no muy agradable, estoy sobre ella  una de mis manos termino bajo su cabeza para evitar que se golpeara y la otra esta bajo su cadera lo que hace que estemos demasiado cerca, tanto que veo sus ojos perfectamente y nuestras respiraciones se hacen una, comienzo a sentirme nervioso mientras intentó mantener mi cabeza en el aire para no terminar con la poca distancia que nos separa, ella me mira y se dirige a mi preocupada

-Kilian ¿Estas bien?

Me causa gracia su comentario

-Me caí encima de ti ¿y preguntas si yo estoy bien?

Ella lo piensa por un momento, parece como si aun estuviera dormida su respiracion se hace mas forzada, me intento levantar un poco pero no puedo ya que su cuerpo esta aplastando mis manos, de la nada mis ojos se detienen en sus carnosos labios y me sorprendo a mi mismo, jamás le había puesto tanta atención, ella reacciona y me regresa una vez más a la realidad

-Kilian.... me estas aplastando

Comienzo a notar que entra como en pánico, su respiracion se hace realmente acelerada lo que hace que me asuste

-Aina necesito que levantes tu cabeza para poder sacar mi mano y poder levantarme

Ella cierra los ojos con fuerza pero no se mueve lo que me hace creer que no escuchó lo que yo dije le vuelvo a hablar pero simplemente no me escucha, hago fuerza y estiro mi mano, me muevo encima de su cuerpo y ella lanza un leve quejido, logro apartarme de ella y me siento en el piso, ella abre los ojos y yo le doy la mano para ayudarla, se recarga en la pared se abraza a sus piernas y esconde su cara, comienzo a preocuparme respira realmente rápido, me acerco a su lado y le susurro

-Aina ¿Que ocurre?

Ella no responde  y mi preocupación aumenta

-Aina... ¿quieres que llame a tu padre?

Ella al fin reacciona y niega con la cabeza

-No Kilian... estoy bien

Aun sigue escondida y no me convence su respuesta

-¿Estas segura?

Ella suspira, asiente y por fin me mira

-Estoy bien solo.... se me fue el aire por el golpe

Veo que esta rara pero supongo que ella asi es, es muy extraña, me siento a su lado y me disculpo

-Perdoname esque no te vi

Ella sonrie levemente

-Si lo note, a la próxima intenta levantarte rápido y no me observes tanto

Ella se burla de mi y me siento avergonzado por que ella nota ese tipo de cosas

-Lo lamento Aina

Ella se levanta y yo hago lo mismo

- No te preocupes tanto Kilian, y menos por mi

No entiendo su respuesta y mucho menos entiendo la forma tan tranquila en la que me lo dice

-¿Por que siempre dices lo mismo Aina?

Ella me observaba, no me responde y cambia el tema

-¿Quieres que me quede con Romi para que puedas dormir bien?

Me desespera no saber nada, toda ella es un misterio, es una chica rara y aun así quiero saber mas de ella, se que no quiere contarme pero tengo que buscar la manera de que lo haga, ella espera mi respuesta y reacciono

-No si quieres ve a casa

Ella asiente y entra en la habitación acomoda las cosas en el sillón, se acerca a Romina, la cobija bien y le da un beso en la frente, toma sus cosas y ambos salimos de la habitación

-Bueno te veo mañana Kilian

Se da la vuelta, se que quiere huir yo la sujeto del brazo y hago que regrese

-No, mañana no, recuerda que hoy iremos a cenar y eso no es negociable

Ella me mira molesta

-No es necesa...

Pongo mi mano sobre su boca y la hago callar

-Dije que no es negociable así que piensa a donde quieres ir y dame la dirección de tu casa

De mala gana la apunta en mi celular se da la vuelta y yo la vuelvo a regresar

-¿Ahora que Kilian?

Comienzo a reír al verla molesta

-Nada solo quería decirte gracias.... a y paso por ti a las 8p.m

Ella resopla

-Ok... te veo en la noche

Dicho eso se va y sonrio al ver que se ha ido demasiado molesta, pero no se va por completo ya que el olor de su perfume se queda grabado en mi memoria

Dormi hasta las 10 de la mañana para poder ayudar a mi madre a bajar, le acerque la andadera para que pudiera hacer el desayuno, ella hacia cosas fáciles ya que no podia desplazarse por la casa tan fácilmente, Romina bajo y se quedo con ella, regrese a descansar un rato más hasta que llego Greg a las dos de la tarde, su primo Fer checo mi auto y por suerte lo pudo arreglar

A las cinco de la tarde llevo a Romina a jugar al parque que esta cerca de la casa, al llegar decide jugar un rato con una niña que conoce pero despues veo que su mirada se dirige hacia un niño como de un año, su padre lo está empujando suavemente en el columpio y su madre hace caras graciosas para lograr que el niño sonria, Romina agacha la mirada y se que ahora esta triste, me acerco a ella y la cargo para llevarla a casa, ella me abraza con fuerza y yo siento un nudo en la garganta

Mi madre nos ve regresar antes y al ver mi rostro supo de inmediato lo que ocurrio, para Romina es muy doloroso saber que su madre murió, pero tenia que decirle la verdad, sabia que si se lo ocultaba tarde o temprano le tendría que contar la realidad y seria mucho más doloroso para ella, mi madre habla con ella y cuando veo que ya esta más tranquila subo a mi habitación para bañarme, a las 7:30 bajo y veo que ya llego la mejor amiga de mi madre, ella me saluda con entusiasmo mientras me dice que cuidara bien de Romina y de mi madre, le agradezco y salgo rumbo a la casa de Aina