La Rosa Roja (Sonamy)

Capitulo 57

La chica de manto blanco corrió con desesperación, aceleraba sus pasos cada segundo en el que respiraba con pesadez y dejaba brotar de sus ojos lágrimas reflejando el miedo de solo pensar en las probabilidades de que su amante ya no esté junto a ella en este mundo. Al aproximarse lo suficiente como para visualizar a la perfección el momento, contuvo un jadeo de terror. El panorama era sangre y escombros esparcidos por toda él área, una escena que para sensibles no era adecuada. La desconocida aún así siguió de igual manera hacia las bestias ignorando los pequeños charcos de sangre que pisaban sus zapatos.

Su aproximamiento no le estaba agradando al werehog azul quien actualmente aún mantenía fuertemente el agarre hacia el werehog negro. Gruñía salvajemente cada vez que el negro trataba de zafarse de la mordida mortal de Sonic errándola cada vez. La chica chillo de miedo por eso y con rapidez se tumbó al pasto pegando la cabeza al suelo en dirección al werehog azul.

"P-Por favor!" Grito seguido de un sollozo "no lo mates! Te lo suplico" lloro en descontrol, deseándole a los dioses que la bestia escuchara sus palabras. Sonic solo gruñó apretando más su agarre, furioso no solo por que quisieron tocar a su chica también fue lastimar a sus amigos.

Amy se encontraba atónita aún recostada en el suelo. Veía con pura atención todo lo que su alrededor pasaba, como Sonic la protegía de una manera diferente a las otras veces, aunque por otra parte de igual manera. Aun así, su mirada de pavor por la incontables manchas encontradas en todo el lugar le provocaba más molestias en su parte media. Escuchar como la carne de la bestia de negro se abría lentamente por los filosos colmillos del azul derramando el espeso líquido rojo de manera alarmante la ponía cada ves más histérica, más los llantos y súplicas de la chica hacia que su pecho doliera, tenía que detenerlo.

Con rapidez llevó los brazos contra la pared traslúcida que se encontraba a su alrededor y con rapidez tocó con la intención de que su pareja la escuchara. La rápida mirada afilada del azulado fue su respuesta más grandes gruñidos hacia ella.

"Sonic! Ya detente" suplico dejando las manos de la pared para envolverlas en su torso "estoy bien, ves? No pasa nada" trato de calmarlo, un sentimiento en su pecho le decía que si se enojaba podría matarlo.

La mirada intensa del werehog azul se apaciguó por un momento  pero tan rápido como su mirada llegó al cuerpo de Silver grupo con intensidad. Silver se encontraba aún consiente envolviendo sus brazos en la gata lila quien está se encontraba totalmente quieta, sin señales de que se levantara o simplemente respirara. Aun con los dolores en sus brazos, torso y piernas, Silver se encarnaba de cubrir cada parte de Blaze por si algo (sea pequeño o grande) tratará de lastimarla.

Su cólera por el individuo entre sus fauces lo calcinaba en su interior, estaba loco por matarlo, estaba ansioso por verlo en el suelo sin vida. Por un instante sus pensamientos eran de profundo odio y venganza hasta volver a ver a la rubia. Aun se encontraba en el suelo llorando a cantares por la criatura que se encontraba en sus fauces, como si fuera lo único que podría hacer. Su rostro lleno de lágrimas le hizo recordar a las tantas veces que Amy lloró por el, por su mala pata y su mala suerte en la vida.

Las llamas azules que rodeaban su cuerpo se fueron apagando poco a poco junto con la mirada de enojo de él. Abrió su mandíbula dejando libre a la otra bestia quien estaba apunto de desmayarse por falta de sangre.
La chica rubia miró al azulado con agradecimiento y sin perder tiempo se deslizó junto al negro.

"Shh shh ya... todo estará bien.." susurro con tristeza mientras acariciaba la cabeza del werehog. Alzando una de sus brazos, pronunció algunas palabras intendible para los que aún estaban y escuchaba ahí. De pronto la mano de la rubia se iluminó a una verde brillante casi segadora que cubría al werehog negro por completo, y como si la pelea nunca se fuera a dar, el werehog salió ileso sin ninguna marca de lucha luego de que la luz se desvaneciera.