11.

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Lucia.

—qu-que me pasó?

—te desmayaste, poco tiempo igual, el doctor está viniendo —habla mi madre

—no, no.. yo no quiero un doctor yo estoy bien, si? por favor díganle que ya no venga

—Lu te tienen que ver, no es normal desmayarse —se metió Joa

—si vuelve a ocurrir lo llaman, si? mientras no

Logré convencerlos finalmente.

Seguimos como si nada hubiera pasado. Todo iba bien, hasta que llegó la hora de merendar. A mi me sirvieron café con huevos revueltos, el olor me daba asco, y llegó un momento en el que no pude evitar pararme y salir corriendo al baño.

Estaba vomitando. Joaquín me alcanzó un vaso de agua.

—nena no es normal —dijo Engracia al verme de nuevo —deja que llame al medico

—por favor mamá, fueron solo náuseas.

—mira cuñadita lo mejor será que te cuides, no queremos enfermos eh. Yo ahora me voy a trabajar y después paso por Fran a fútbol, que te mejores —Viviana se despidió de todos y así marchó.

En un momento que mamá salió a comprar cosas para la cena, Joa y yo quedamos solos. Él aprovechó para cuestionarme.

—ya me vas a decir que te pasa? —habló

—nada, que me va pasar, mi amor

—Lucía, no estás embarazada?

Me sorprendí con su pregunta —que?? no Joaquín, claro que no.

—acaso no querés un hijo?

—Joaquín mi útero es hostil!! es muy difícil que yo quede embarazada, por el amor de dios —dije a punto de explotar

—y-yo no sabía

—nadie lo sabe

—de todas formas esa posibilidad no se descarta, porqué no vamos a que te hagas una prueba?

—si yo compro la prueba todo el barrio se enteraría, porque no vas vos?

Él asintió y así lo hizo, nuevamente fue a comprar para mi. Volvió súper rápido y traía la prueba completa, es decir donde salía de cuantas semanas estaba.

—hacetela —ordenó

Me dirigí al baño, seguí las indicaciones, salí, esperé 5, 10 minutos y ya tenía que estar el resultado.

Me acerqué caminando a donde estaba Joaquín

—y?? que salió? estás esperando un bebé?

Me largue a llorar —Joaquín, amor —me abalance a su pecho —perdóname mi vida, yo no quería, no buscaba estar embarazada, te juro que me cuidé —lo abrazaba hasta que me correspondió.

Joaquín.

Que carajo.

—pero amor no reacciones así, me haces el más feliz a mi, te amo

—de verdad me lo decís?

—si mi vida —le contesto limpiándole las lagrimas

—es un milagro , es muy difícil que yo quede embarazada.

—el destino nos quiere juntos definitivamente

—que le diré a los demás?

—que estás embarazada, no te preguntaran de quién —bromee

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