Finally... Your Mine | NaruHina

16. Escabullimiento

POV Naruto

Despreciable.

Me sentí despreciable cuando le escribía la notita a Hinata mientras ella dormía tan tranquila. Eran las 5:43 am... tuve que irme rápidamente y buscar al Sabio Pervertido y a esa familia en la puerta principal. Terminé la nota presionando el botón del bolígrafo y metiéndolo dentro de mi bolsillo, rápidamente releí la nota para asegurarme de que tuviera sentido. Después de leerla, asentí mientras colocaba el papel en su mesita de noche.

Me coloqué la mochila sobre el hombro mientras observaba el rostro de Hinata. Sus ojos estaban dulcemente cerrados y sus labios estaban ligeramente temblorosos, debido a su profundo sueño. Me incliné, aspirando sus dulce, dulce aroma mientras besaba su frente.

—Perdóname, Hinata —susurré incorporándome.

Después de darle una último vistazo, salí silenciosamente de la habitación y cerré gentilmente la puerta.

—————

POV Hinata

Mis ojos se abrieron gentilmente. Un rayo de luz solar impactó en mi ojo izquierdo, obligándome a cerrarlo. 

—¿Naruto? —pregunté sentándome en la cama y parpadeando. Me encontré con espacio vacío a mi lado.

Hice que mis dedos recorrieran el espacio vacío. Suspiré, me pregunto dónde estará Naruto. Tal vez estaba desayunando, eran las 10:07 am. Me encogí de hombros y me recosté. Me acurruqué debajo de las cobijas y me volví a acomodar. Escuché un ruido. 

Tap

Lo ignoré pero...

Tap........ tap....... tap........

—¡Pero qué- —dije saliendo de la cama. Escuché detenidamente.

TAP

El sonido venía de la ventana. Me acerqué y abrí la ventana y miré hacia abajo. 

—¡Por fin despiertas! —rio Kiba

—Kiba-kun, ¡estoy tratando de dormir! ¡No lances piedras mi ventana! ¿Qué quieres? —pregunté molesta.

—Necesito hablar contigo —dijo con mala cara.

—¡Bien! ¡Sube las escaleras! —grité cerrando repentinamente la ventana y volví a mi lado de la cama.

Bostezando, vi que había una nota de papel en mi mesita de noche. Fruncí mis labios mientras abría el papel.

Querida Hinata, por favor no te enojes. Espero que entiendas que tengo que asistir al Sabio Pervertido en una misión. Esto tomará un mes. Soy consciente que es mucho tiempo, pero, espero que sepas que todos los días y todas las noches estaré pensando en ti. También dejé mi anillo de bodas en la mesita de noche, no quería perderlo. Ya te estoy extrañando, Hinata...

¿Me vas a esperar?

Te amo.

—Naruto

—Tierra a Hinata... —murmuró Kiba mientras sacudía su mano al frente de mi cara.

Volví a ver al anillo de Naruto. Mi rostro se llenó de lágrimas cuando solté la nota.

—¿Hinata? —preguntó Kiba.

—Na... —murmuré con lágrimas

—¿Ah? —preguntó Kiba confundido.

—¡Naruto! —lloré. Oculté mi rostro en la almohada.

—¡Hinata! —gritó Kiba— Hinata... ¿qué pasa? ¡HINATA!

Ignoré a Kiba. Yo solo lloraba a gritos.