CONFUSIÓN

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XV 

CONFUSIÓN

—¿Ren?

—¡Huyó! —le gritó a su hermana mientras echaba a correr por la calle en dirección a donde suponía que se fue Kaname.

Ai al escucharlo dejó caer su sombrilla y fue tras él.

—Por aquí —dijo al darle alcance a su hermano y tomándolo del brazo lo jaló hacia un callejón solitario.

Usando sus habilidades saltaron hacia el techo de uno de los edificios y de allí agudizaron su vista y comenzaron a buscarlo entre la gente en la calle.

Ren lucía realmente preocupado, pero también estaba molesto; al final de cuentas Kaname se había escabullido justo frente a sus narices.

¿No se supone que soy un vampiro entrenado como cazador y él un humano?

Tomando un nuevo impulso saltó hacia el siguiente edificio. Kaname no podía haber ido muy lejos ¿cierto?

Papá no se equivocó cuando me habló de él —pensó

—No creo que haya ido muy lejos —Ai concordó con su pensamiento, al aparecer a su lado.

—Perdóname oneesan, me lo encomendaste y aun así...

—Exageras, está bien, el problema es papá.

No se sintió mejor por esas palabras, al contrario. Caminó por el borde del techo mientras sus ojos escrutaban insistentemente a los humanos que transitaban por la calle. Quizás no se había ido por ahí, tal vez debería explorar otra calle o...

—Ren, tranquilo.

Ren no le prestó atención... pero fue entonces que lo vio.

—¡Por allá! —Señaló y una sensación de alivio lo invadió. —¿Pero qué...? ¿A dónde rayos quiere ir solo?

Ai no dijo nada, pero se veía bastante tranquila así que el repentino impulso que sintió de bajar y reñir al hombre se esfumó.

—Por ahora sólo vigilaremos —dijo Ai y así comenzaron a seguirlo desde lo alto.

Ren observó a Kaname. Caminaba tranquilamente por la calle, pero parecía estar buscando un lugar en específico y no sé había percatado de ellos. Probablemente estaba seguro de haberlos perdido.

Vaya confianza la suya.

Aun así era imposible para Kaname pasar desapercibido y al parecer no se daba cuenta. En primer lugar, era bastante atractivo por lo que atraía la mirada de los demás humanos a su alrededor, que a su paso se giraban para verlo y luego, su porte y forma de caminar también destacaba, así que en parte fue gracias a eso que pudo localizarlo.

Como fuera, a pesar de tener su atención centrada en el hombre, Ren comenzó a localizar a los vampiros que pudieran estar cerca.

—Me da la impresión de que hice esto hace mucho tiempo con cierta persona... —Dijo repentinamente Ai mientras miraba tranquilamente a su padre, pero Ren comprendió que con decir aquello se estaba refiriendo a él, por lo que la miró y sonrió sutilmente avergonzado — ¡Espera! ¡no puede ser...!

El corazón de Ren dio un saltó al escuchar eso último y de inmediato se giró hacia Kaname creyendo que algo le había pasado; pero en cambio...

—¡Haré que papá me odie! —dijo Ai realmente exaltada y asustada.

Ren lanzó un suspiro y miró con exasperación a su hermana porque lo había asustado.

—¿Eh?... No, eso no es...

EN OTRA VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora