(Historia concluida)
"Deberíamos estar cantando canciones navideñas en vez de gritarnos toda la noche. Cariño, todo lo que quiero para Navidad es que tú y yo arreglemos esto."
Para Lena Luthor no ha sido un año fácil, la muerte de su padre le ha afe...
Lena fue la primera en despertar, le dolía ligeramente la espalda baja, le había gustado dormir en el fuerte de almohadas, pero sin duda alguna prefería su cama.
Se quejó por lo bajo y se acomodó, buscando alguna posición lo suficientemente cómoda para su espalda; pero cuando abrió los ojos se dio cuenta que no le importaba si tenía que dormir en un fuerte de almohadas por el resto de su vida, sonrió ampliamente y tomó una foto mental de lo que veían sus ojos; sus dos ojiazules estaban profundamente dormidas, Lexie estaba abrazada a su osito y tenía la nariz adorablemente roja debido al frío, Lena de inmediato la arropó correctamente; por su lado, Kara estaba durmiendo de manera bastante similar, estaba abrazada a una almohada y su cabello dorado caía sobre su rostro, Lena se preguntó si estaría pensando en ella mientras abrazaba la almohada; se mordió el labio y tocó la suave y cálida mejilla de su esposa.
—Hola, bella durmiente— Saludó Lena una vez que Kara abrió los ojos.
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—Hola, conejita— Respondió la rubia con la voz algo áspera. —Buenos días.
—Sí que lo son.
Lena se las ingenio para pasar sobre su hija sin aplastarla y se acostó encima de su esposa, Kara le abrazó por la cintura y le dió un pequeño beso en la frente.
—¿Te sientes mejor?— Cuestionó Lena en un susurro y tocó suavemente las mejillas de la rubia.
—Mucho mejor— Asintió Kara con una radiante sonrisa. —Es que tuve a la doctora más inteligente y más sexy de todo el mundo para cuidarme— Dejó besos en la mandíbula de Lena y fue ascendiendo hasta el lóbulo de su oreja, dónde lo mordió suavemente.
—Kara— Se rió suavemente cuando un hormigueo recorrió su cuerpo al momento de que la rubia mordió su lóbulo derecho.
—Shh, vas a despertar a Lexie— Susurró suavemente y sus labios se dirigieron al largo cuello de Lena, dónde dejó varios besos húmedos.
—Vaya que te sientes mejor, eh— Lena sonrió y solo hecho que Kara besara su cuello hizo que la humedad entre sus piernas empezara a crecer. Tomó el rostro de la rubia y rápidamente juntó sus labios.
Lena soltó un gemido casi imperceptible cuando la rubia acarició su cintura y sus manos apretaron su trasero, Kara sonrió ante el sonido gutural de su esposa, había extrañado tanto los gemidos de la ojiverde. Ambas se quedaron estáticas cuando Lexie empezó a moverse, la pequeña giró hasta el otro lado, ocupando totalmente el espacio que Lena había estado ocupando con anterioridad.
—Debemos deternos— Suspiró Kara con resignación, sus pupilas estaban dilatadas.
—Lo sé, es muy temprano para provocarme, señorita Danvers.
—Es su culpa por ser tan sexy, señorita Luthor— Dejó un beso en su mejilla.
Lena sonrió ampliamente y se acostó en el pecho de Kara, la reportera le acarició la espalda con suavidad y abrió sus piernas para que la ojiverde pudiera acomodarse cómodamente. Pasaron algunos minutos así, simplemente abrazadas y disfrutando del cálido del abrazo.
