Capítulo 6

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Seguían sin poder creer que es lo que me había sucedido, yo una loba era simplemente algo que me tomaba por sorpresa, pero ahí estaba yo en cuatro patas y con pelaje, pero me sentía tan libre de esa manera que comencé a enamorarme de ello y como no si krinon era tan hermosa. Pero eso ocurría mientras estaba en trance por el paraíso esmeralda en el que me encontraba, de alguna manera debía de salir del trance pero no fue por mi cuenta exactamente sino que lo hice al darme cuenta de que aquel lobo gris comenzaba a acercarse y antes de poder responder cruzo su cuello por el mío dándome una especie de abrazo, pero eso fue antes de que comenzara a morderme las orejas con lo que me fije que él era un lobo bastante grande yo no me quedaba un poco corta pero no tanto, así que reuní un poco de fuerza y lo empuje para que así pudiera morderle a él las orejas, pasamos un buen rato así hasta que vimos que la luna comenzaba a emerger entonces el lobo gris cambio hasta volverse Jacob justo en ese momento recordé lo que ocurrió cuando lo conocí por lo que oculte mi hocico entre las patas y empecé a avanzar cautelosa hasta que por el olfato supe dónde estaba mi mochila, la tome con los dientes y salí corriendo hasta que choque con un árbol, en ese momento abrí lo ojos y mire a todo al rededor, parecía no haber nadie por lo que recurrí al olfato así supe que Jacob estaba a algunos metros más allá de donde me localizaba, me concentre y volví a mi forma humana eso me daba escalofríos aún ya que debía acostumbrarme, tome la mochila y me puse un short de mezclilla y una playera negra solo que me agache para tocar mi pierna notando la sensación de mi tatuaje en ella, era mi recuerdo de la única vez que había salido del castillo claro que justo al momento en que salí del estudio me atraparon y obligaron a ocultarlo pero mi uso frecuente de pantalones no me lo impedía. Cruce un pequeño riachuelo con los pies descalzos hasta que llegue a donde estaba Jacob ya con ropa buscando por todos lados como si hubiera perdido algo, hasta que escuche que gruñía y a la vez lanzó un grito al aire agarrándose del cabello en modo de frustración, me acerque de a poco hasta que toque su hombro y de la nada esos ojos esmeralda que al encontrarse con los míos bajaron varios tonos hasta que se vieron oscuros así que antes de que viera que es lo que ocurría me junto hacia su cuerpo hundiendo su cabeza en el hueco que se formaba en mi cuello.

Me resultaba tan curiosa la forma en que él lograba acercarse a mí y que se lo permitiera incluso ya que huía muchas veces de aquel contacto, pero estar con este chico que casi no conocía me inspiraba una gran tranquilidad, hasta que el separo su cara de ese lugar y me vio a los ojos ahora sí que me tenía en sus garras.

Cuando me dirigió esa mirada y en cima sonrió de tal manera que me derretía por dentro mientras que mi corazón latía a mil por hora, necesitaba separarme de él o no podría resistir las ganas de querer besar esos labios, tome aire y hable.

-creo que ya te encuentras mejor, ahora me puedes soltar- lo último lo dije con hilo de voz, pero el con los sentidos de lobo que posee me escucho así me soltó, pero me quedo sosteniendo de la mano y me quedo viendo hasta que, - pues creo que lo mejor es que sigamos nuestro camino-, solo que vi en sus ojos algo que no me esperaba era ¿deseo?, en que rayos me había metido.

Lo que creía a ver visto no paraba de darle vueltas al asunto, y menos con las miradas de parte de Jacob hacia mi persona, estuvimos caminando por un largo rato andando hasta que al cruzar algunos árboles llegamos a un pequeño pueblo, me impresiono mucho sin duda. 

¿Qué hacia un pueblo en medio del bosque?, solo caminaba por hacerlo ya que Jacob me llevaba de la mano hasta quien sabe dónde, pero se detuvo frente a una mansión con forma de cabaña de manera monumental, estaba dirigiéndose a esa casa que es lo que hacía. sin pensarlo me quite de su agarre, y viéndolo con una expresión entre asustada y confundida escupí, - ¿a dónde crees que vas?, no vez el tamaño de esa casa debe de ser alguien importante- a lo que solo se hecho a reír a carcajadas hasta que pudo hablar otra vez, pero conteniendo las ganas de reírse aún más, - linda esta es tu casa de ahora en adelante, ahora vamos que tengo que presentarte a unas personas que sin dudad están ansiosos por conocerte- con ello me quede aún más confundida.

se acercaba a mí y tomo mi mano llevándome directo a esa cabaña, debía de estar soñando ese lugar iba a ser mi casa, seguía sin creer que el chico que iba frente a mi tenía tan gigantesca casa pero lo que me mas presente se hacía en mi mente era una sola pregunta ¿Quién rayos es Jacob? .

Tengo que encontrar respuestas lo más rápido posible o de lo contrario terminaría volviendo al castillo a pesar de que estaría encerrada, pero era lo que conocía y estaba dudando si la decisión de haber salido de aquel lugar era la correcta, no me cabía duda me acababa de volver loca, como estaba siquiera pensando en cómo ir a ese lugar otra vez, tenía que sacar esos pensamientos de mi mente y ocurrió cuando entramos a esa casa.

-Por fin llegas, hay asuntos que discutir y no puedes evadir tu responsabilidad lo sabes-, le decía un chico más pequeño que yo eso si me sorprendió por lo regular estaba segura de que era alta pero esto era una broma le sacaba la cabeza a este chico, al alzar la vista me vio y luego a Jacob, el cual solo le sonrío y dijo - hermano te presento a mi mate, y  mi luna- esto hizo que el chico se arrodillara y gritara con las manos en alto aun sosteniendo los papeles que tenía,- !!POR FIN, GRACIAS A LA DIOSA¡¡- esto hizo que me asustara refugiándome detrás de Jacob para después ver como una pareja de señores no muy mayores y otro chico junto con dos chicas llegaban agitados, con solo verme detrás de Jacob, empezaron a festejar y dar gritos de alegría.

En qué casa de locos me había metido ahora.   

Huellas hacia el bosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora