-Jayson, te dije que dejaras el juego en pausa.-Le fulminé con la mirada y él me sonrió con una sonrisa sarcástica.
-Adele, estaba en pausa, pero mi dedo se movió y tocó accidentalmente el botón de pausa.-Fuí corriendo hasta donde estaba él y lo tiré al suelo.
Había pasado media semana desde que intenté convencer a mis padres para ir de viaje con Nat y me encontré por primera vez en cuatro años a Jordan. Mis padres no habían cambiado de opinión, y Jordan, ya no era tan simpático como lo recordaba, había cambiado completamente.
-Para que te perdone me tendrás que ganar en lucha libre.-Estaba encima de él, y yo le golpeaba sin hacerle daño, o almenos se intentaba. Los dos reíamos, hasta que vino la persona que menos quería ver en estos momentos.
-Jayson, mamá te llama. ¿Adeline?-Me levanté de encima de Jayson, y le tendí una mano para ayudarle a levantar.
-¿Acaso tengo monos en la cara?-Me cruzé de brazos esperando una respuesta coherente, pero eso no llegó.
-¿Jayson y tu... Sois novios?-Entró a la habitación y nos miró con los ojos como platos. Jayson dió un paso adelante y le respondió.
-Sí... Si somos novios.-¿Qué? Le miré con los ojos como platos y él me guiñó el ojo.-¿Celoso?
-¿Por qué debería estarlo? Estoy feliz de que estéis en una relación, y que seas mi cuñada.-Se fue de la habitación y cerró la puerta. Me tumbé en la cama boca arriba y con una cara de mil demonios y casi a punto de llorar, hasta que me detuve a pensar por qué Jayson había hecho eso.
-¿Desde cuando somos novios?-Le miré levantándome de la cama y él me sonrió.
-Ha funcionado Adeline.-Dicho esto, me abrazó como si no hubiera fin y yo me quedé extrañada, mucho.
-¿Qué ha funcionado?
-A mi hermano le gustas.-Alcé las cejas y me separé de él.
-Jayson, acabo de comprobar que verdaderamente estas loco.
-Encima que te ayudo a comprobar que mi hermano está colado por ti, ¿me tratas así?-Puso su mano en el pecho como si estuviera dolido.
Jayson sabía perfectamente que me gustaba su hermano, pero no por que se lo dije yo, él lo descubrió por si solo. No me preguntéis como por que ni yo lo se, pero me daba igual que él lo supiera, somos como hermanos. Gracias a que no se parece a Jordan he podido confiar en él. Jayson tiene el pelo castaño, y en cambio de Jordan que tiene los ojos verdes, él los tiene marrones.
Cuando acabamos de jugar la partida me despedí de la familía Jones y me fuí a casa.
Al día siguiente, cuando volví a casa, ya que estaba en el parque corriendo, me encontré a mis padres en el sofá, (como siempre), pero esta vez acompañados por una persona bastante conocida.
-¿Robbie?-Pregunté alzando las cejas, mi primo sonrió de oreja a oreja y yo fuí corriendo hasta él y lo abracé.
-Hola enana.-Él me correspondió y deslizó su mano por mi pelo despeinándolo.
-¿Qué haces aquí?-Me separé de él y me senté a su lado.
-Robert ha venido a pasar las navidades aquí, era una sorpresa.-Respondió mi madre sonriendome.
Robbie y yo somos primos desde hace 7 años, desde que mi tía se casó con Mike. Habéis adivinado, no somos primos de sangre pero nos tratamos como si lo fuéramos. Robbie tiene 19 años, y la verdad es bastante (demasiado) guapo. Tiene el pelo castaño, unos ojos azules preciosos y un cuerpo espectacular. Y su caracter es muy adorable. A pesar de todos sus atributos, no tiene novia, y yo soy feliz. Si tuviera novia, sería una de esas tipicas zorras idiotas con un buen cuerpo (con gigantes tetas, culo enorme y cuerpo delgado), y yo no la aguantaría.
-¿Así?-Mis padres asintieron y yo besé la mejilla de Robbie.-¿Dónde dormirá?
-En el cuarto de invitados.-Respondió mi padre como si fuera obvio.
-¿Desde cuando tenemos un cuarto para eso?-Alcé las cejas, me levanté del sofá y me quité la chaqueta quedándome en manga larga.
-Tenemos ese cuarto de toda la vida, ¿has vivido aqui 17 años y no sabías eso?-Respondió riendose mi madre. Yo me encogí de hombros y reí.
Después del interrogatorio que mi madre le hizo a mi primo, Robbie subió a ese cuarto y yo lo seguí.
-¿Te ayudo?-Pregunté señalándole las maletas.
-¿Tu quieres algo verdad?-Reí ante su comentario y yo asentí.
-Claro, mi recompensa será un helado y una tarde con mi precioso primo, ¿verdad que si?
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-Tengo una pregunta que hacerte.-Miré a Robbie seriamente y él asintió.-¿Alguna vez te has enamorado?-Él me miró mordiendose el labio, como si se estuviera aguantando la risa... En 3... 2... 1... Empezó a reir a carcajadas hasta que no pudo respirar y yo le fulminé con la mirada.-¿Qué te hace tanta gracia imbécil?
-¿A qué viene esa pregunta? Tienes 17 años, pero pareces una niña de 6.-Él siguió riendose y yo me encogí de hombros.
Después de acomodar las maletas de Robbie, fuimos a comprar helados, como él me prometió, y ahora estábamos en un parque, sentados en unos columpios.
-En teoria es una pregunta seria, me gustaría saber la respuesta.-Le miré seriamente y él me miró con las cejas alzadas y dejandose de reir.
-¿Por qué me preguntas eso? Acaso...-Me sonrojé y él se rio.-¿Tienes novio?
-¿Qué? No, ¿como voy a tener novio yo?
-Me acabas de hacer una pregunta bastante tonta, Adeline eres preciosa, y si no fueramos primos sería tu esclavo.-Me sonrojé y le dí un golpe en la cabeza, él comenzó a reir.
-¿Eso es lo que piensas?-Él asintió y me levanté del columpio.-Tu también eres preciosa.-Le acaricié la mejillas y reimos.-Vamonos Ruperta.-Le cogí de la mano y volvimos a casa.
-¡Ya hemos llegado!-Me quité la chaqueta y en el perchero no solo estaban las chaquetas de mis padres.-¿¡Mamá hay alguien más!?-Robbie también dejó su chaqueta en el perchero y al entrar al comedor nos encontramos a una chica con melena negra que le llegaba al pecho y unos ojos marrones, Nat. Ella y toda su familía estaban sentados en el sofá. Acabo de comprobar que el sofá es más grande de lo que pensaba. Nat se levantó y me abrazó.
-Hola Nata.-Le correspondí y ella alzó las cejas al ver a Robbie.-Él es Robert, mi primo.-Me acerqué a ella y le susurré "es guapisimo, solo te lo dejaré a ti". Ella me pegó en el brazo y yo reí.
-Hola... ¿Nata?-Mi primo rió y Nat se sonrojó al escuchar ese apodo que le había puesto yo.
-No, no soy Nata, soy Natasha.-Ella le sonrió y le dío un beso en la mejilla. Jayson se levantó del sofá.
-Yo soy Jayson.-Robbie le tendió la mano y se dieron un apretón.
-Yo Robbie.-Respondió con una sonrisa.
-Él es Robbie, nuestro sobrino. Ha venido a pasar las navidades con nosotros.-Dijo mamá dirijiéndose a los padres de Nat. Ellos asintieron.-Y Robbie, ellos son la familía Jones, nuestros vecinos y amigos. Él asintió.
-¿Y ese quien es?-Me susurró Robbie dirijiéndose a Jordan.
-Es Jordan, hermano de Natasha y Jayson.-Susurré también.Natasha en multimedia c: Espero que os haya gustado este capítulo y sigáis mi novela como hasta ahora. Dadme vuestra opinión o si debería cambiar algo, me ayudaría mucho.
Besitos
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Mi profesor privado
RomanceAdeline es una chica de 17 años. Normal, simpática, agradable... Tiene bastantes atributos, aunque un gran defecto... Las matemáticas. Las odia, y en su vida a aprobado tan siquiera un examen. ¿Qué pasará cuando sus padres se cansen de eso? ¿Jordan...