Twich - Kenma Kozume × OC.

¡FELIZ NAVIDAD!

Aquella fecha era muy importante para Mizuhara, pues aquella chica era fanática de la Navidad.
Las personas solían decirle que parecía una niña pequeña al ver su emocion ante tal festividad, pero eso nunca le impidió saltar de alegría junto a Shoyo, quien estaba en iguales o peores condiciones.

Se sentía realmente alegre de tener a tantas buenas personas a su alrededor, y sobre todo de poder haber forjado su tan soñado grupo de amigos.

La emoción de la ojiverde era clara y concisa, pero Akane no comprendía por qué la Navidad de este año sería tan especial, como dijo más de quince veces en la mañana.

— Si se nota que eres mi amigo, debería conseguir algunos menos idiotas definitivamente. –golpeó su rostro con su palma ofendiendo al de lentes a su lado.

— Pero si nunca me explicaste por qué tanto exceso de emoción... parece como si te hubieras tomado 5 botellas de vodka junto a una tableta de pastillas de rivotril, para de saltar y gritar por favor...

— Lo que pasa es que... no serás el único que traerá a alguien hoy a la noche. –Akane tiró su cuchara accidentalmente al suelo, negándose a creer lo que la fémina le estaba contando.

En un santiamén se encontraron los dos ordenando, limpiando y decorando toda la casa. Una vez todo estuvo listo, Akane puso música en los parlantes con el volumen bien fuerte y se dirigió a la cocina junto a Mizuhara, poniéndose un delantal y ayudándola a hacer diversas comidas para la cena.

— Sólo tú, no necesito más. Te adoraría lo que dure la eternidad. –corearon ambos.

- Debes ser perfecta para -soltó el azabache usando una cuchara de madera como micrófono.

— Perfecto para

— Perfecta para mi, mi amor.

Miranda! es un grupo de pop argentino que les mostró Oikawa, primo lejano de Akane, una vez hacía ya mucho tiempo. Desde que escucharon la primera estrofa de "Don" supieron que ese era su grupo. Comenzaron a embriagarse y cantar sus canciones, aprendiendo español única y exclusivamente por ellos.

En aquella cena se encontraban Akane junto a Tobio, quien fue presentado como su pareja, los padres de Akane, los de Mizuhara y por supuesto, la ya mencionada.

Había algo en el rostro de la fémina, una sonrisa ansiosa la atrapaba por completo.

Y de repente, el timbre sonó.

Mizuhara corrió cual niña pequeña hacia la puerta, dejando a toda la familia encontrarse con un Kenma esbozando una sonrisa nerviosa.

Akane escupió la sidra de manzana que estaba tomando, para que luego Tobio comience a reírse mientras lo ayudaba a salir de su ahogamiento.

— ¡Kenma, viniste! Estoy tan feliz de verte... –sonrió aún más, si eso era posible, para luego abrazar al rubio, el cual tenía un muy leve sonrojo en su rostro.

— No podía rechazar tu oferta, aparte... Kuroo me obligaría a cantar esa rara canción sobre la tabla periódica. Gracias por invitarme, Kazu-chan. –sonrió apenado, apretando levemente a la de orbes verdes.

La madre de Mizuhara, con tal de molestarla, gritó.

- POR FIN. -su voz resonó fuertemente, seguido de un golpe en la mesa. Kenma comprendió de dónde la menor de los Kazuma había sacado tanta furia al perder un juego.- DESPUES DE AÑOS, ¡VUELVES A TRAER UN NOVIO A CASA!

Akane volvió a atragantarse con aquella bebida, comenzando a reír a carcajadas. Tobio se rió junto a él; ambos sabían que aquella pareja era demasiado idiota para funcionar y darse cuenta de sus sentimientos correspondidos.

- Pero si es------- ah, olvídalo. –resopló cansada y cerró la puerta.— Familia, él es Kenma Kozume, un amigo.

Ambos se sentaron en la mesa y siguieron comiendo en familia.
Al terminar el postre comenzaron a beber, contándose anécdotas graciosas y dejando en verguenza a algún que otro presente.
El ambiente era cálido, se notaba que cada persona era feliz allí y los Kazuma y los Hatsume eran reconocidos por ello.
Pasar la navidad junto a ellos equivalía a puras locuras e idioteces sanas. Parecían la típica familia de película navideña, valga la redundancia.

Esa fue la primera navidad en más de diez años en la que Kenma pudo sentirse en familia otra vez; después de todo, sus padres nunca fueron muy presentes. Esa era la razón por la que Kenma odiaba la Navidad... hasta hoy.

¡HEY HEY HEY! ¿CÓMO ESTÁN?

¡FELIZ NAVIDAD A TODES MIS HERMOSES LECTORES! Espero que la hayan pasado muy bien y hayan podido ver a sus familiares y amigos.

¡GRACIAS POR LAS 3K VISTAS, ESTOY MUY FELIZ!

¡Les quiero!
Noya's out.

Pd. Adjunto las canciones mencionadas en el cap.