Epílogo.

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Dieciséis Años Después.

Torneo Nacional De Natación - 11:10am.

El cielo, despejado y lleno de un hermoso color celeste hacían vibrar su pecho de emoción, las pocas nubes que habian forman unos divertidos peces bailarines ¿o era solo su adolescente imaginación? río, no lo sabía y tampoco le interesaba, solo amaba ver el cielo mientras el agua abrazaba su cuerpo.

Varios aplausos y el sonido de un silbato la regresaron a la realidad, alzó la mirada y notó como su nombre aparecía en el primer lugar del tablero.

Otra vez.

No le sorprendió, más ciertamente fue decepcionante ¿no habría alguién que le hiciera competencia?.

Con un semblante suave y amable salió del agua y ayudó a las demás competidoras a salir también, miro hacia las gradas y pudo ver la sonrisa de su tío Rin y la pequeña mueca de su tío Haru, suspiro con algo de tristeza al no ver a las dos personas que más amaba en ese momento.

-Ena -dijieron con un tono de voz divertido-

De un brinco la joven se giró y con una gran sonrisa recibió a sus progenitores.

-¡Padre, papá! Creí que no vendrían -habló con alegría-

Sousuke suavizó su semblante, se acercó y beso la frente de su princesa.

-Lamentamos llegar tarde -miro su uniforme- no tuve tiempo de cambiarme, había mucho papeleo -bufo-

La joven Alpha rio y bajo un poco su mirada, encontrándose con un par de ojos iguales a los suyos, Ena amaba la calidad mirada que siempre su papá le regalaba, era como si viera el mayor tesoro del mundo, jamás la culpó de su actual situación ni de nada de lo vivido, para ella Makoto Tachibana de Yamazaki siempre tenía palabras de amor y calidas miradas.

-Felicidades Ena -sonrió el Beta- llegaste en primer lugar -

-Si, bueno, no es nada -se encogió de hombros mientras se acercaba al de ojos verde y besaba su mejilla-

Makoto negó con una sonrisa.

-No es bueno ser arrogante -

-No es arrogancia papá -dijo algo apenada- solo ... es monótono -suspiro-

-Pues no creo que eso duré mucho -habló con cierta burla Yamazaki- al parecer tendrás pronto competencia -

Los ojos verde de Ena siguieron la mirada de su padre, encontrándose con unos fríos ojos azules y una ondulada cabellera castaña.

Ella.

-... Es hermosa -murmuro la Alpha-

Sousuke y Makoto soltaron una pequeña carcajada.

-Te dejamos para que puedas hablar con ella -intervino comprensivo Tachibana-

Ena tartamudeo sonrojada y tras suspirar asintió, encaminándose hacía la joven que la mataba, literalmente, con la mirada.

-Se sonroja tan fácilmente como tú -dijo con una tenue sonrisa Sousuke-

-Y es tan decidida como tú -continuó Makoto sin dejar de ver a su hija, más su mirada se entristeció- me hubiera gustado estar con ella cuando era tan solo una bebé -

El Alpha suspiro y con su mirada color turquesa recorrió al Beta.

Tras nacer Ena ambos no creyeron que hubiera esperanza, más los doctores al parecer no pensaron lo mismo y tras él pasar un mes en el hospital inconciente logró despertar, solo para encontrarse con su amado en coma y con su hija siendo cuidada por Rin y Haruka, fueron cinco largos años llenos de desesperación e incertidumbre, temiendo que Makoto nunca más despertara pero lo hizo, su Beta despertó, amo a su pequeña tan solo con verla, más la felicidad no fue completa ya que lamentablemente el de ojos verdes no volvería a caminar, al menos no prontamente, sería otra larga y rigurosa batalla para ello.

Pero dicen que el amor todo lo puede ¿no? y él estaba seguro de que su amor podría con esto y más.

Su amor podía con todo.

-Vamos a casa cariño -dijo depositando un suave beso en la cabeza del Beta- aún tenemos un largo tiempo con nuestra pequeña -

Makoto asintió y dejó que Sousuke comenzara a mover la silla de ruedas.

-Sabes, te amo, te amo mucho más que la primera vez que nos confesamos -rio- creo que te amaré incluso si muero y renazco otra vez -

Yamazaki rio, paro y se colocó frente al Beta.

-Vas te vale Mako, porque tú traición es la única que no aceptaría -se inclinó y beso los labios contrarios- primera mató a todos antes de permitir que te alejes de mí -

Sus miradas conectaron, tan hambrientas de amor y deseó como siempre, tan dependientes y oscuras que realmente en vez de asustarlos los incitaba a más.

¿Este tipo de amor estaba mal?.

Tal vez.

Pero era su amor y solo de ellos.

Al diablo los demás.

Sousuke solo existía para Makoto y Makoto solo existía para Sousuke.

Este era su tipo de amor.

Su único amor.













Fin.

Tú Traición -SouMako-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora