𝑩𝒐𝒃𝒍𝒊𝒐𝒕𝒆𝒄𝒂 - 𝑷𝒓𝒊𝒎𝒆𝒓𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒕𝒆

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Los recesos de las nubes. Un lugar que sin duda podría describirse como simplemente irreal por lo hermoso del lugar, y es que no solo sus paisajes eran hermosos, si no también las personas que vivían en dicho lugar, o bueno por lo menos los discípulos nativos del lugar.

Si bien era un lugar a veces demasiado callado, eso era lo que lo hacía aún más hermoso.

Era un lugar simplemente perfecto a ojos de cualquiera.

Tristemente para su actual líder¹, lan QiRen, no todos compartían su gusto por mantener el lugar en silencio, y un claro ejemplo de ello, era Wei WuXian.

Ese chico simplemente era indisciplinado, muy escandaloso, incluso Lan QiRen perdía cada día más las esperanzas de poder disciplinar al Joven, a este paso le sacaría canas verdes. Es por eso, que puso a su mejor discípulo y sobrino a cargo del muchacho, estaba orgulloso de que su sobrino pudiera con aquel revoltoso.

Después de todo, ¿Que podría pasar con dos jóvenes adolescentes solos por más de una hora?, No es como si fuera un hombre y una mujer, no había nada de que preocuparse.

Si, grave error. Pero esto lo descubriría más adelante, cuando le llegará la cuenta de sus desiciones.

Por otro lado nuestros jóvenes protagonista de una bella historia de amor en un futuro, se encontraban copiando las reglas, o bueno, por lo menos uno debería de estar haciendo eso.

— Lan Zhan~ — Llamo al joven frente a el — Copiar las reglas es aburrido....— hace un pequeño puchero — Mejor salgamos a casar faisanes ¿Que dices? — sonríe.

Frunce ligeramente el ceño y aparta la mirada de su libro —Matar está prohibido en el receso de las nubes — como respuesta recibe un puchero....adorable a decir verdad.

— Nunca dije que sería dentro del receso de las nubes — murmura aún con un puchero en su cara. La joven estatua de jade solo pudo soltar un suspiro.

—Si terminas tu trabajo asignado antes de tiempo...— se detiene para meditar sus siguientes palabras, ya que el de tunicas negras está completamente atento a lo que dirá acontinuación. Si tan solo estuviera igual de atento cuando esta en clases.... Frunce el ceño en un gesto casi invisible y prosigue — Iré contigo a la ciudad un rato — Vio cómo Wei WuXian remplazaba el puchero en su cara por una enorme sonrisa, tan hermosa que tubo que cerrar los ojos. Nadie noto como un tenue rosa se posaba en el lóbulo de sus oídos.

—¿En serio Lan Zhan? — Pregunto como si fuera una mentira, sabía que jamás le mentiría. Pero eso no se lo esperaba de el — ¿No estas mintiendo? —

—Mn. Mentir está prohibido — afirmó.

Y como por arte de magia, en menos de media hora el joven de tunicas negras había terminado (Aunque tampoco es que le faltará mucho). Salió disparado de aquel pacifico lugar, claro, arrastrando al otro.

Pobre lan WangJi, ese chico sin duda sería su perdición².

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El viento soplaba suavemente, moviendo ligeramente las hojas de los árboles, y el cabello del chico de morado que se había dormido bajo uno.

La imagen era hermosa de ver para cualquier, pero por lastima, el único con la suerte de haberla presenciado fue uno de los Jades, más específicamente, Lan Xichen. El cual admiraba casi con devoción, como su futuro esposo³ dormía tan tranquila mente.

Era una pena que tuviera que despertarlo. Reunido fuerza de quién sabe dónde, y no sin antes guardar cuidadosamente la hoja que traía consigo.

—Joven Jiang — lo mueve ligeramente — Despierte, ya nos tenemos que ir — solo vasto de unos ligeros movimientos más para que el otro abriera sus ojos u examinarla su alrededor. —Que bueno que despierta, ya era hora de irnos — le da una amable sonrisa.

Un empujón al WangXianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora