Dawn Lewis tiene claras algunas cosas sobre su vida. La primera es va a hacer todo lo posible por convertirse en Delegada de Gran Bretaña para la Confederación Internacional de Magos. La segunda es que quiere con locura a Charlie Weasley. Por eso, no es de extrañar, que haya conseguido el trabajo con el que ha soñado durante toda su vida y para el cual se ha preparado a conciencia y, además, esté con el chico de sus sueños. Y tiene todo tan claro que no va a dejar que el estrés, los viajes, las largas reuniones y los montones de papeles de los que se tiene que ocupar le quiten todo lo que quiere.