Karol, Jamás Te Irás De Mi Lado.

Es devastador sentirse acosada y maltratada, atrapada en una situación que te priva de tu libertad. Es doloroso lidiar con alguien tan egoísta que no puede ver más allá de sus intereses propios. Todo parecía en orden, como si llevaras una vida normal, pero la realidad se tornó sombría. La soledad y el sufrimiento se convirtieron en mis compañeros, mientras luchaba por encontrar una salida a esta pesadilla, pero no; hay destinos marcados, y mi destino fue ser alejada de una vida . La lucha por recuperar mi voz y mi libertad es constante, y aunque el camino es difícil, sigo buscando la luz que me guíe hacia mí alas.

-Recuerda esto: jamás saldrás de aquí. Me perteneces, Karol, y no te dejaré ir -su voz resuena en mi mente como un eco aterrador, un mantra que se repite en cada rincón de mi ser. Su ojos me persiguen, como un espectro que se alimenta de mi miedo.

Nadie puede ser capaz de algo tan cruel. Pero él lo es. Su obsesión por controlarme es un juego macabro, donde cada movimiento mío es monitoreado, cada suspiro es un recordatorio de su dominio. La tensión se siente en el aire, densa como una niebla que me envuelve, y mientras intento resistir, las paredes parecen cerrarse a mi alrededor.

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