Feliz Navidad

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Navidad era una época muy bonita para algunas familias, amigos, amigas, parejas, entre otros grupos que se juntaban a comer. A veces, en restaurantes o en la casa de alguien del grupo. A Jongdae le gustaba la época, más colorida según él porque el rojo y verde resaltaba de lo blanco de la nieve. ¡era precioso! Pero estresante. La comida, la decoración, que lo niños no entren a la pieza donde guardan los regalos, que las mujeres dando indicaciones, que los hombres discutiendo asuntos de hombres y uno que otro cooperaba esa noche... uh, solo eso provocaba dolor de cabeza. ¡Lo bueno es que había una pandemia que atacaba el mundo! En realidad eso no era lo bueno, sino que el gobierno había restringido la movilización y las reuniones por lo que ese día Jongdae lo pasaría solo con su novio.

— Hay que pedir comida, no quiero cocinar nada este día. — Jongdae se lanzó a la cama, a un lado de su contador favorito. Había enviado su trabajo con dos días de anticipo así que podía darse el lujo que no hacer nada durante la festividad.

— Ya pero... lo harás tú. Hoy no quiero hacer nada. — El más alto se giró a ver a su novio, acariciándole la mejilla con el pulgar, presionando ligeramente la esquina de la boca. — Mamá llamó y envio saludos, dice que cuando termine esto quiere que vayamos a verla. ¿Deberíamos llevar algún regalo?

— Creo que sí, así nos dará kimchi. No se lo digas a mi mamá pero el de tu mamá es mejor. — Jongdae se giró para verlo directo a los ojos y se acercó un poco más, como susurrando un gran secreto. Sonrió amplio al escuchar la risa de Chanyeol, e inevitablemente beso sus labios.

— Tú secreto está guardado amor. — Chanyeol también le beso los labios, sellando el secreto en silencio para después levantarse y llamar a algún restaurante con delivery. Sabia que Jongdae no lo haría.




El 24 de diciembre transcurrió tranquilo para la joven pareja, sin bullicio, ordenes, en una paz y tranquilidad imaginable para ambos pues sus familias eran más de pasar las festividades como estas en familia por lo que, desde que formalizaron, se fueron turnando. Un año con la familia del profesor y otro con la familia del contador.

La noche cubrió Corea del Sur y, a diferencia de otros años, el silencio en las calles era notorio. Tal vez un poco triste el panorama para algunas personas pero era realmente relajante para aquellos que vivían en las localidades más llamativas.

La comida llegó justo a las diez de la noche, Jongdae la recibió con una sonrisa bajo la mascarilla y pagó, deseandole feliz navidad al joven repartidor.
Ordenó el pedido en la mesa y trató de decorar acorde al día la sala y el comedor. Luces daban otro color a la casa y en vez de un árbol enorme de color verde o blanco solo compraron un arbolito de, con suerte, unos 30 cm. No necesitaban más, a los lados, un par de regalos le hacían compañía.
Chanyeol salio de la habitación vestido con un buzo gris y un poleron negro, a diferencia de Jongdae que vestía un buzo rojo y una polera verde.
Cenaron en calma, hablando de la universidad o del trabajo, pero recordando los viejos tiempos. Que para esta fecha hubieran estado estrenados buscando el regalo del amigo secreto, o una teñida de ropa formal para la reunión familiar.

Terminaron de cenar, limpiaron y volvieron al sofá, buscando una película en la televisión nacional. Mi Pobre Angelito se transmitía en un canal y decidieron dejarla ahí, había que aprovechar antes de que cobraran por ver un clásico.
Juntos, abrazados y solo alumbrados por las luces rojas, amarillas, verdes y azules, vieron la película.

Pasaron las 12 de la noche cuando la película terminó. No esperaron más y abrieron los regalos. Un abrigo, peluches, otro cactus pequeños y Jongdae, solo para molestar (y cuidar) a Chanyeol, le regalo un set de mascarillas. Siete y con los colores de la bandera gay.

— Un naranjo extra porque me gusta ese color. — Rio alto cuando su novio los guardo para después abalanzarse sobre su profesor

— Veo veo... uhm... ¿a quien crees que veo?

— ¿Al... amor de tu vida? — Esos pequeños momentos en los que se ponian "melosos" eran bonitos.

— Veo veo al amor de mi vida. Feliz navidad, Dae.

— Feliz navidad, Yeol.







Oh sí. Siempre tarde yo. ISDJDKSKDKDI FELIZ NAVIDAD CHIQUIS. NUNCA ES TARDE PARA DESEAR UN BUEN MOMENTO.

Jiji feliz año nuevo porque de seguro hoy no subiré nada.

Veo veoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora