𝙟𝙪𝙨𝙩, 𝙩𝙝𝙚𝙞𝙧 𝙡𝙤𝙫𝙚 𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙚𝙨

Regalo de Navidad

Hyunjin abrió los ojos con pereza a la vez que se estiraba, haciendo sonar todos los huesos de su cuerpo. Pronto el aroma de galletas recién horneadas lo hizo sonreír y sentarse en la cama, haciendo que la sabana cayera y dejara ver su desnudo cuerpo por ciertas cosas que habían sucedido anoche.

–¡Hwang Hyunjin! –El grito de su esposo se escuchó desde la cocina y el mencionado mordió su labio, ya veía venir su regaño por no limpiar el desastre que habían hecho en la cocina luego de la cena y no exactamente por cocinar.– ¡Dijiste que ibas a limpiar y no lo hiciste! –El cuerpo del omega apareció en la puerta de su habitación, haciéndole sonreír aún más al ver que lucía la hermosa marca, que hace unas horas había vuelto a morder, y una de sus camisetas que le cubrían casi hasta las rodillas.–

–Lixie mi amor, yo creo que los dos deberíamos limpiar, ya sabes, no es solo mío. –El alfa sonrió de manera encantadora mientras se levantaba para ir por lo menos en busca de ropa interior a su armario.–

–Yo estaba preparando tu regalo y tú dijiste que ibas a limpiar, ahora aguantate, sin galletas navideñas para ti. –Felix se dió la vuelta para caminar nuevamente a la cocina, totalmente ofendido.–

Hyunjin soltó una carcajada antes de ponerse un boxer junto a un pantalón y salir finalmente de la habitación, encaminadose a la cocina que ahora estaba totalmente limpia, una bandeja de galletas con forma de angelitos reposaba en la mesada y las mencionadas eran decoradas por el bonito omega que era su esposo.

–¿En serio no puedo comer galletas? –Hwang abrazó por la espalda a su esposo, pasando sus manos por su cintura y juntándolas en la pancita del omega.– Hey, alguien está más gordito. –De repente Felix paró de decorar sus amadas galletas para mirar al mayor con el ceño fruncido.–

–Fuck you, Hyunjin. –Y, nuevamente, ofendido el menor se retiró de la cocina para ir camino a la habitación y encerrarse en esta.–

Hyunjin parpadeó algo confundido y frunció su ceño, ya varias veces le había dicho a su pareja que estaba más gordito, claramente en broma, pero jamás había reaccionado de esa manera.

De repente por medio del lazo empezó a sentir la tristeza que inundaba a su omega, su lobo empezó a ponerse inquieto haciendo que él también se pusiera así. Caminó hasta la puerta de la habitación y al intentar abrir esta no pudo pues el seguro había sido puesto.

–Lixie, cielo, ¿Qué sucede? –Preguntó el alfa apoyándose en la puerta, asustado por no saber qué estaba pasando con su pareja.– ¿Hice algo mal? ¿Te molestó que te dijera gordito? Es solo una pequeña broma cielito.

No obtuvo respuesta alguna y soltó un pequeño bufido. Sabía que fácilmente podría, a través del lazo, saber qué le pasaba a Felix pero así no funcionaban ellos, simplemente esperaban que la otra persona estuviera listo para contar lo que sucedía.

–Uhm, ¿Necesitas mimitos? Si me dejas pasar puedo llenarte de besitos. –Hyunjin se sentó en el piso, pensando en qué decirle al pecoso para que lo dejara entrar.– Uhm... ¿Chocolate? Puedo ir a comprar ya mismo, ¿Tal vez que limpie toda la casa como te gusta? ¡Ya sé! Lavaré los platos durante una semana.

Pudo escuchar una risita a través de la puerta, cosa que lo hizo sonreír porque su omega por lo menos ya no estaba tan triste.

–Puedes pasar desde hace rato bobo, recuerda que las puertas tienen eso de que si intentas abrirlas con fuerza se traban automáticamente. –La voz del omega se escuchó bajita y Hyunjin rió antes de levantarse y entrar a la habitación.– Bien Jinnie, anoche te dí una parte del regalo de navidad. –Felix tenía algo detrás de su espalda.– Así que tengo que darte la otra parte.

–¿Son galletas? –Preguntó soltando una risita, recibiendo una mala mirada del menor.– Ya, ya, lo lamento bonito.

–Bueno, en realidad esto puede traer muchas respuestas a mi comportamiento tan extraño últimamente. –Felix sacó lo que tenía detrás de sus manos, siendo esto cinco pruebas de embarazo, todas positivas.– ¡Seremos padres!

Y Hyunjin recibió el mejor regalo de navidad que pudo haber pedido nunca, aunque claramente eso fue lo que pensó apenas despertó de su desmayo.

++++++++++++

Ehm, no sé qué es esto pero tenía ganas de escribir algo relacionado con Navidad.