¡Soy una... QUE!

Kikyo, y la furia de inuyasha. Parte 2

//Al día siguiente//

Hoy era nuevo día, y en alguna parte del bosque de Japón, dentro de una cueva podemos ver inuyasha dormir plácidamente en el reino de los sueños, o eso fue hasta que sintió dos cosas.

El primero, inuyasha sentía los molestos rayos del sol golpeando sobre su rostro para su molestia, sacándola de su hermoso sueño. Y segundo, inuyasha sentía una sensación extraña proveniente de su pecho, y aun que se sentía raro, también un poco placentero, bueno, bastante placentero, al bajar la mirada, vio de que se trataba, y lo que vio la dejo sin palablras.

En su pecho, se encontraba shippo durmiendo plácidamente, pero lo que realmente llamo su atención, era que en algún punto, shippo se había acurrucado de bajo de su kimono, y entre sueños había bajado su sostén, dejando sus pechos al descubierto, enrojeciendo a inuyasha de la vergüenza por ese detalle, ahora mas que nunca daba gracias de estar sola, pero lo que realmente tomo a inuyasha por sorpresa, fue que shippo se encontraba chupando uno de sus pechos como si fuese un bebe, provocando pequeños gemidos en inuyasha al sentir a shippo chupar y lamer con un poco de fuerza su pecho. y aun que lo correcto era despertarlo y separarlo de su pecho, La verdad era que a inuyasha no le molestaba, siempre y cuando fuera su hijo el que lo hiciera, y ahora se lamentaba el no poder producir leche, y así poder amamantar de forma correcta a su hijo, pero no podría hacer eso hasta quedar embarazada.

Ante ese pensamiento inuyasha tubo un pequeño escalofrió, la idea de encontrar un hombre y que la preñe le causaba un deje de malestar, pero a la vez, la idea de cargar en su interior a un hermanito o hermanita para shippo no le molestaba, tal vez con el tiempo ella se plante el darle un compañero de juegos a shippo, pero no ahora, por el momento la idea le incomodaba un poco, aun que no tanto como antes.

Dejando atras esos pensamientos, Inuyasha se acomodo para cargar a su hijo aun conectado a su pecho, y mientras dejaba que shippo "bebiera su leche" se acomodo la ropa y jugo con el cabello de su hijo, tal vez mas tarde buscaría una pocion o encantamiento que le permitiera producir leche, después de todo, su hay conjuros y pociones para cosas casi absurdas, talvez allá una para eso .

Una hora después, dentro del bosque podemos ver a shippo he inuyasha caminar por el bosque en búsqueda de comida, pero si uno se fija bien, podían ver que el rostro de shippo estaba rojo como la remolacha, y viendo a cualquier lado menos su querida madre, que por cierto, tenia una sonrisa mas radiante que el sol.

Inuyasha: vamos musuko, no debes avergonzarte por eso, es algo normal.

Shippo se sonrojo aun mas de ser posible, incluso o le salía vapor de las orejas.

K Kaa-san, ya no soy bebé par hacer.......e eso.

Inuyasha sonrió y se agacho para darle un beso en la mejilla a su hijo, provocando que se ponga como una locomotora.

Inuyasha: losé, pero tu siempre serás mi bebé.

Shippo no lo soportaba mas, en ese momento quería que la tierra se abriera selo tragara, pero el ultimo clavo para su ataúd fue lo ultimo que dijo su madre.