Hecho en... Rusia?

Realidad 2.1: confrontación

El ambiente había muerto dentro del local, varios de los comensales ahora estaban enfocados en los dos hombres que se encontraban mirándose fijamente, los encargados del local estaban expectantes, si fueran clientes normales ya habrían interrumpido aquel encuentro y ordenado que salieran del lugar, pero estos claramente no eran clientes normales, ninguno de los trabajadores quería interrumpir lo que decidiera hacer al peliblanco, por lo que mientras ambos adultos se miraban fijamente rápidamente cerraron el local para que no entrara más gente, no arriesgarían a más personas.

- Lincoln (serio): niños, después hablaremos de esto, retírense junto al abuelo

Los dos niños rápidamente tomaron la mano de lynn sr y empezaron a jalarlo, él no fue tonto y se dio cuenta de la intención, por lo que decidió hacer caso, aun así temía por su hijo, el anciano pelirrojo tenía una contextura bastante maciza, por no decir que se notaban los músculos en sus brazos, un buen golpe de su parte podría fácilmente noquear a una persona, sin contar con que lucía como alguien experimentado en pelear (ya que le recordaba en parte a su suegro), por lo que aunque salió del local se quedó en la entrada, observando como podía y de ser necesario interrumpir la pelea.

Dentro del local los demás no decían nada, ni hacían nada, temían que aquel peliblanco notara su existencia, su renombre era tal que todos en el local le conocían y no se querían arriesgar.

Mientras anton se estaba mentalizando, solo había peleado una vez en el pasado con su yerno y fueron interrumpidos por su hija, algo que le agradecía tanto como le molestaba, pero ahora nada los detendría, y si todo resultaba bien podría sacarse ese miedo que tanto lo atormentaba y poner por fin las cosas en su lugar, que un suegro tema a su yerno? Eso no debería pasar, él debería temerle, no al revés.

Ya mentalizado pudo calmar el temblor de sus piernas, relajo su postura y respiro, su visión había cambiado y ahora estaba centrado en una sola cosa, golpear a ese peliblanco que tenía en frente.

Lincoln por su parte estaba tranquilo, parado muy rectamente con los brazos cruzados, observando con una mirada fría a su suegro, una mirada carente de vida, carente de sentimiento y de piedad, para cualquier espectador parecía que lo miraba en menos, pero no era así, desde hace años que él no se confía en una pelea, no importa el rival él ira seriamente, y más contra el idiota de su suegro, una golpiza que llevaba mucho tiempo necesitando.

De fuera se pudo escuchar el bocinazo de un vehículo y como si fuese la señal que ambos esperaban levantaron su guardia.

Anton avanzo rápidamente en dirección recta hacia Lincoln, agachando un poco la cabeza mientras posicionaba sus brazos en su pecho, cuando estuvo a punto de embestirlo el peliblanco roto en su propio eje usando de pivote una de sus piernas y con el brazo empujo levemente el ahora accesible torso de su suegro, desviando la trayectoria de la tacleada y pasando por el lado con apenas el mínimo esfuerzo, acto que anton aprovecho para soltar uno de sus recogidos brazos y alcanzar a sujetar la camisa del peliblanco, arrastrándolo brevemente mientras el detenía su propia embestida.

Esto causo un momentáneo desequilibrio en el peliblanco, lo que anton pudo ver y aprovecho para posicionarse justo en la dirección del desequilibro con la intención de controlarlo con una llave, para su propia desgracia el peliblanco aprovecho su desequilibro para generar peso en dicha dirección, y posicionando su codo en la inercia del movimiento logro dar un fuerte pero certero codazo en la columna del anciano.

Este al sentir el impacto pudo sentir un leve cosquilleo en sus piernas pero decidió ignorarlo, ahora con el golpe que había recibido sabía que su oponente debería recomponer su postura para poder hacer otro movimiento certero, momento que el aprovecho para forzar un cabezazo en la mandíbula de este, el cual el peliblanco pudo evitar echándose para atrás, cosa que el anciano previo y aprovecho para atacar su pierna.