Mi pequeña esperanza

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Acaso importaba que me siguiera esforzando?

Nada importa realmente, acaso el destino era realmente algo de lo que no podemos escapar?

Por lo visto no, y este le gusta jugar lentamente con nosotros.

Acaso puedo culpar a mis padres por lo que me tocó vivir? Lo dudo sinceramente.

Puede que sean personas algo irresponsables en ocasiones o que la vida que han decidido vivir les hagan blanco fácil para las cosas, lo intentan realmente pero eso no impide que salga lastimada del daño colateral.

Y ahora estoy perdida en un lugar que realmente no conozco, con gente que no conozco ni me conoce, cuidando a un hermano menor que no sabe las verdaderas razones por las que estamos lejos de nuestros padres.

Realmente quiero llorar, tuve que dejar toda una vida atrás, seres queridos, gustos personales, decisiones y proyecciones, todo eso tuvo que esperar o ser desechado, se supone que es por mi protección y la de mi hermanito, pero sigo cuestionándome si realmente fue la decisión correcta.

Se supone que nadie me conoce en este lugar, que puedo empezar mi vida desde cero sin preocupaciones y elegir, pero realmente puedo hacer eso?

No soy más que una refugiada que ni siquiera tiene la edad legal para tomar sus propias decisiones, llegue a este país con un poco de dinero, unas llaves de un departamento, un hermano menor dormido y ninguna certeza si podría hablar nuevamente con mis padres o cualquier otro familiar.

Je, ni siquiera me puedo dar el gusto de desahogarme considerando que el pequeño puede escucharme.

No creo que note si me voy por un par de minutos...

- 30 minutos después –

Recuerdo haber escuchado muchas veces sobre el sueño americano, como era el país de la libertad y las oportunidades... simplemente es una de las mejores historias de fantasía que alguna vez escuche.

Pensar que ni siquiera tuve tiempo de aprender el idioma y estoy en este lugar, ni siquiera puedo comprar un dulce sin que me miren extraño y vea desprecio en sus miradas, como si no perteneciera a ese lugar.

Si no soy capaz de siquiera diferenciar a una persona preguntándome por la hora de alguien que me quiera asaltar realmente tengo alguna posibilidad de sobrevivir en este lugar? No puedo evitar pensar que mi padre es idiota en ocasiones.

Tengo mucha hambre y ni siquiera soy capaz de pedirle al señor del carrito un helado, algo tan básico pero a la vez tan difícil, ni siquiera quiero intentar mencionarme con mi idioma, quizás solo me gane una nueva mirada de asco o un insulto que no entenderé, y se supone que debo terminar la preparatoria cuando solo veo líneas sin mucho sentido en el papel y la pizarra?

Realmente empiezo a odiar este lugar, se ve tan tranquilo pero a su vez oculta tantos problemas, es como si fuese una trampa, una bella trampa que busca desprevenirte para atacarte y destruirte cuando ya es demasiado tarde.

Si no fuera por el carácter que me hicieron forjar y por la vida que tuve ya me hubieran asaltado un par de veces, je, el último intento fue mientras un gordo policía me veía y comía una dona, cuando el tipo saco la navaja el simplemente miro a otro lado, lo mismo cuando le rompí el brazo a ese sujeto.

Si me hubiera quedado quizás hubiese muerto, pero al menos lo hubiera hecho en familia y sin lamentarme nada, ahora adicional a todos mis problemas soy una cobarde – sus ojos comienzan a cristalizarse lentamente y baja la mirada al piso – ni siquiera cuestione la decisión y tome a mi hermanito y me subí a ese avión, todo por unos comentarios y un poco de miedo.

Hecho en... Rusia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora