Parte 221: Un compromiso

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Tommy se encontraba acostado en su cama, con una fiebre bastante alta similar a la que pasa este escritor una vez al año.

A su lado se encontraban Katrina y Nocencio, siendo que la primera estaba sentada en un pequeño taburete. La medicación estaba junto a ella. 

"Sí que tiene la fiebre alta..."

"El pobre no puede ni moverse..."

"No recuerdo que cogiese frío, siempre va abrigado"

"Ayer durante la cena actuaba un poco raro"

"Bueno..."

"Y en mitad de la noche se despertó por una pesadilla que tuvo"

"¿Sabes de qué trataba?"

"No, se desmayó antes de contarme, pero..."

"........"

"Dijo algo de que llamó a Soponcio"

"Qué extraño... hace mucho que no tenía pesadillas..."

"¿Crees que puede ser algo sobrenatural?"

"Podría ser..."

"........"

"El chico pudo ver dos fantasmas y luego estuvo el hecho de que resistía más o menos a Krueger... no me parece algo descabellado"

"Oh..."

Aunque la pantera tenía esas mismas sospechas, no le tranquilizaba en absoluto oírlo de boca de otra persona.

"Iré a pedirle al doctor West que venga más tarde"

"De acuerdo, yo seguiré cuidándole"

"Ten cuidado, no vaya a pegartelo" 

"Nocencio, ¿cuántas veces has estado malo desde que nos conocemos?"

"No sé, ¿unas catorce?"

"¿Y cuántas he estado yo?"

"Que yo recuerde ninguna..."

"Por supuesto, en esta relación yo soy la que tiene que estar sana"

"No le veo mucho senti..."

"Nocencio, vete a trabajar, te prometo que todo estará bien"

"Vale, pero si hay algún problema llama a la comisaría, ¿de acuerdo?"

"De acuerdo"

La pantera se le acercó y le dio un beso en la frente antes de que se marchara. Luego pensó en ir por una toalla húmeda para el chico.

En ese rato el joven pudo recobrar un poco el conocimiento.

"Uff... qué dolor..."

"¿Solo fiebre o también garganta?"

"Ambas co..."

Delante de él apareció un orangután con traje de botones rojo. Se le veía fumando lo que parecía ser un puro.

"Los dolores de garganta son lo peor..."

"........"

"Sobretodo cuando fumas, aunque es todo un gozo..."

"Quién... ¿quién es usted?"

"Mi nombre es Lloyd, un placer"

"Cómo... cómo ha..."

"Será mejor que no hables demasiado, tu garganta te lo agradecerá, chico"

"........"

"La verdad es que esto de la fiebre nos ocurre a todos"

"........"

"Por eso estoy aquí, porque el viejo Grady pensó que podría explicarte un poco mejor lo que está pasando aquí"

"¿Grady?"

"Sí, una lechuza, un poco siniestro"

"........"

"Verás, todo esto es parte de la iniciación"

"¿Iniciación?"

"Escucha, chico, trabajar en el overlook es algo que requiere compromiso" - explicó el orangután - "¿Sabes lo que es el compromiso?"

"........"

"Supongo que lo sabes, ya que siendo tan joven tienes trabajo"

"........"

"Yo a tu edad también comencé a trabajar en el hotel... qué tiempos..."

"........"

"Pero la clave es esa, el compromiso, el deber, la obligación... y el overlook requiere todo eso, requiere tu completo..."

"Pero... pero... ¿qué tengo que ver yo?"

"Buena pregunta... digamos, que estás pagando el pato por tu padre"

"¿Pa... ¿Papá?"

"Tu padre tenía potencial, era un diamante en bruto..."

"........"

"Pero carecía de ese compromiso total a su trabajo, no supo estar a la altura del overlook"

"........"

"Tu madre tampoco, lo cual es una lástima, era muy guapa"

"........"

"Pero tu... tu si tienes ese toque, tu si pareces... estar dormido..."

Efectivamente el joven había vuelto a caer dormido por la fiebre. El orangután se encogió de hombros y desapareció antes de que entrase Katrina.

¿Por qué olía a puro en la habitación?

Animal Crossing: Fanfic Edition Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora