Parte 224: Una sopa delicada

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Ankha estaba dispuesta a preparar la sopa de pescado de lubina en su casa, pero se vio inusualmente acompañada por un par de individuos.

Una era Mary Bloody, mientras que el otro era Calm, al cual se le notaba estaba en su día libre por la camiseta hawaiana que llevaba.

"Nuevamente, ¿por qué habéis venido?"

"Pen... pensamos que podríamos... ayudar..."

"Y para asegurarnos de que no lo envenenas o similar"

"Mary, eres la única que se come la comida que hace Canela"

"¿Y qué hay con eso?"

"Que probablemente seas la peor catadora de la historia de este pueblo"

"Qué exagerada"

"Realmente... tiene su punto..." - dijo el camaleón

Ankha tenía todos sus ingredientes preparados, así como el libro de recetas.

Las chicas empezaron cortando los ajos y la cebolla, mientras que Calm limpiaba el pescado sorprendentemente bien.

"¿Sabes cocinar?"

"Yo.. emm... un poco..."

"Menos mal..."

"Eh, me siento atacada" - dijo la oveja - "Y ofendida"

"No sabes cuanto me alegro..."

"Por... por favor, no discutáis..."

"¿Y quién te enseñó a cocinar?" - preguntó la gata

"Mi... mi padre y yo aprendimos hace un par de años..."

"¿Es que tu madre no cocina?"

"Desde que está en la cárcel no..."

"........"

"........"

"........"

"Hace... hace buen tiempo, ¿verdad Ankha?"

"Sí, supongo que hace un tiempo esplendido"

"Pero si hace mucho frío, humedad y han dicho que llove..."

"¡He dicho que hace un tiempo esplendido!"

"¡S-sí! ¡Sí lo hace!"

A pesar de que el camaleón encontraba en Ankha algo así como una amiga, eso no significaba que no le tuviese cierto miedo.

La gata por su parte cortó el pescado y lo puso en agua a hervir con los condimentos preparados.

"Mary, corta el tomate, Calm tu mira dos minutos"

"¿Has hecho sopa de pescado antes?"

"He hecho muchos platos de pescado"

"¿Por qué?"

"Porque mi tío es culinariamente insuficiente y no puedo alimentarme toda la vida de fruta o lo que sirve Fígaro"

"Pobre Fígaro, no deberías hablar de él así"

"¿Por qué no? Ni que fuese un personaje relevante"

Casualmente el camarero estaba pasando por al lado de la casa y escuchó esas palabras, que le hicieron derramar una lágrima de tristeza.

"Ya está el tómate"

"Vale, añádelo y esperemos a que se cueza bien"

"Tengo curiosidad, Ankha, ¿qué tanto te gusta cocinar?"

"Pues muy poco, la verdad" - dijo muy segura

"Oh..."

"¿Qué? ¿Qué ocurre?"

"Nada, es solo que... cocinas sin que te guste cocinar..."

"Si cocino es para no morirme, pero no me gusta tener que estar una hora cocinando para luego tardar diez minutos en comer"

"Comprensible"

"Yo... yo creo que cocinar tranquiliza mucho..."

"Eso es lo que siempre dice la señorita Canela"

"Todo lo que diga esa mujer sobre la cocina lo tomaré como falso, ¿queda claro?"

"Como... el agua..."

"Bueno, parece que ya está tu lubina del amor" - dijo la oveja

"¿Mi qué has dicho?"

"Dijiste que le querías llevar un poco a Tommy, es evidente que..."

"Era una pregunta retórica, Mary..."

"Oh, bueno, eso no quita que..."

"Y si vuelves a llamar así a la sopa, tu nombre no será lo único ensangrentado"

"¿Mi nombre? ¿Ensangrentado? No lo pillo"

"Yo... yo quiero irme ya..." - pidió el camaleón

"No, primero vas a probar la sopa"

"Eh, ¿por qué él es el catador y yo no?"

"Porque cualquier persona tendría más papilas gustativas que tu"

Y así entre palabra y palabra, el pobre Calm se vio envuelto en otra discusión que no tenía nada que ver con él...

"Oh, crispis..."

Animal Crossing: Fanfic Edition Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora