Parte 348: Una perrita mayor

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Quedaba solamente dos días para la boda y muchos se encontraban nerviosos. Aunque otros como el padre de Canela muy apenados.

Este se encontraba en la estación junto con Cándres, ya que estaban esperando a que alguien llegase a la estación de tren.

"Papá, deberías estar más contento"

"¿Cómo voy a estar contento?"

"Bueno, tu hija se va a casar..."

"¡Exacto! ¡Es nefasto!"

"No, es algo muy bonito"

"Tu no lo entiendes, Cándres..."

"Papá, Canela ya es mayorcita, no es la pequeña perrita que se meaba accidentalmente delante del tío Frost"

"........"

"Tiene trabajo, vida, va a casarse..."

"Jamás perdonaré a ese politicucho..."

"Aprenderás a hacerlo cuando Canela tenga cachorritos"

"¿Cómo dices?"

"Mira, viene el tren"

Efectivamente el tren paró frente a ellos, siendo que únicamente había una pasajera.

Del tren salió una perrita visiblemente mayor, de pelaje algo marrón y que llevaba un kimono verde con estampado de flores. Se le veía bastante tranquila.

"Buenas tardes a todos..."

"Mamá, cuánto tiempo sin verte" - dijo antes de abrazarla

"Ya sabes que no me gusta viajar demasiado"

"Sí, siempre te entra mucho vértigo"

"Hola, Shizue"

"Oh, querido, ¿dónde está Canela?"

"En el ayuntamiento... ¿qué tal el trayecto?"

"Movidito... casi me caigo solo una vez"

"Mira que eres..."

"Pero bueno, esas son nimiedades, vayamos al ayuntamiento"

"De seguro Canela se alegra de verte"

"Eso espero, no la he visto en... emm... ¿un año?" - se quedó pensativo 

"Tampoco te ha presentado al chico..."

"Copito, no te pongas así" - le intentó quitar peso - "Tu sabes lo vergonzosa que es nuestra hija... además, ya he oído mucho de él..."

"Seguro que te agrada, mamá"

La familia puso rumbo al ayuntamiento, donde Canela y Ben estaban trabajando. Quedaban dos días, pero el trabajo era el trabajo.

"¿Seguro que tu padre no vendrá con chubasquero?"

"No, no vendrá..."

"Menos mal..."

"Aunque quizás lleve sombrero, por sus peculiares rasgos físicos"

"Eso... eso no lo veo mal..."

"Lo más importante es..."

La puerta del ayuntamiento se abrió y la primera en entrar fue Shizue. Al verla la colita de Canela reaccionó moviéndose mucho y salió corriendo a abrazarla.

"¡Mamá! ¡Ya has llegado!"

"Te dije que estaría a tiempo..."

"Me alegro mu..."

"........"

"Hola, hermanita"

"Ah... vosotros también..."

"¡¿Cómo que vosotros?! ¡¿No quieres ver a tu padre?!"

Y mientras la secretaria discutía con su padre, su madre vio a Ben observándoles desde cierta distancia, algo cohibido por la situación.

"Tu debes de ser Ben, ¿verdad?"

"Sí, soy... Ben Willis"

"Canela me ha hablado mucho de ti... lamento no haberos visitado, pero me sienta muy mal viajar..."

"No, no pasa nada, yo tampoco he ido a conocerla"

"Pero es endendible, tu trabajo y el de Canela ocupan mucho tiempo"

"Emm... gracias..."

"Puedes llamarme Shizue..."

"Vale, pues... es un placer conocerla, sus hijos son bastante... agradables"

Canela le hablaba mucho a su madre sobre Ben y las historias que vivía con él. Además de con la gente del pueblo.

"Su hija también es una buena empleada"

"Espero que no sea muy estricta, aunque cuando iba al instituto era algo desorganizada"

"¿En serio?"

"Sí, creo que con la pubertad..."

"¡Mamá!"

"¿Qué ocurre? Querida"

"¡No cuentes esas cosas tan vergonzosas!"

"Pero si solo es una anécdota" - se rió un poquito - "Pero cielo..."

La mujer, con bastante calma y tranquilidad, agarró a su hija con fuerza de la mejilla y empezó a apretar bastante fuerte.

"No le vuelvas a gritar a tu madre"

"Lo... lo siento..."

"Recuerda que eres una señorita..."

Ahora el humano veían a quienes habían salido los hermanos...

Animal Crossing: Fanfic Edition Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora