Animal Crossing: Fanfic Edition Vol.2

Parte 265: Un segundo capítulo

Capítulo 2. En este capítulo me he decidido a hablar sobre el año posterior al fallecimiento de mi padre. Realmente puedo recordarlo muy bien. No el fallecimiento sino el año posterior a su muerte. Vivir con Nocencio y Katrina no parecía demasiado raro, de hecho me sentía bastante cómodo en ese entorno. 

Aunque he de admitir que los primeros intentos de Nocencio por cocinar no son cosas que me agrade recordar. Al menos ha mejorado con los años, algo que desgraciadamente no puedo decir de la señorita Canela.

Katrina es con diferencia la persona que conozco que mejor cocina. Cuando empecé a vivir con ella leyó muchos libros de cocina. Decía, sabiamente, que prefería encargarse ella antes de que Nocencio causara algún problema. Al final acabaron aprendiendo a cocinar juntos así que supongo que fue una buena decisión. 

Y hablando de buenas decisiones... estuvo la de Katrina de enseñarme matemáticas y otras asignaturas... porque por aquí no hay colegios...

"Normal que todos parezcan subnorma..."

"¿Qué le parece? Señor Redyn"

"Bueno... no está mal... supongo..."

Tommy estaba en el observatorio, donde también se encontraban Estela y un Redyn sentado en una esquina y con un parche en el ojo.

"¿Ocurre algo?"

"Es este parche... me cuesta leer con él..."

"Cierto, debe de ser incómodo"

"Que se aguante" - le dijo la ave - "Él insistió en leerlo"

"Bueno punto... debería leerlo Estela, ella tiene más conocimiento de la literatura..."

"No exageres"

"¿Ha escrito algún libro? Señorita Estela"

"Sí, escribí uno llamado Constelaciones con Nombres de Fruta"

"Guau... ¿existe la constelación de la manzana?"

"Por supuesto que no, eso sería extremadamente estúpido"

"........"

"........"

"¿Qué? Sí que sería muy estúpi..."

"Tommy, ¿por qué no vas a enseñárselo a Sócrates?"

"Claro, y gracias por sus... emm... reseñas..."

"De nada, para la próxima vez... pídeselo a otro"

El chico se marchó corriendo, siendo que el lobo empezó a tocarse un poco el parche. Estela vio esto con desaprobación. 

"¿Cuánto tiempo tengo que llevar esto?"

"Con un par de días debería estar bien"

"Genial... al menos no fue en el ojo izquierdo..."

"Sí, es donde tienes la cicatriz"

"........"

"........"

"¿Tienes curiosidad?"

"Emm... pues... un poquito..."

"Me la hice en un pequeño accidente que tuve"

"¿Un accidente? ¿De coche?"

"No, fue en bicicleta" - gruñó un poco - "Estaba lloviendo y resbalé un poco, derrapé y acabé en el suelo"

"No deberías hacer cosas tan peligrosas"

"Mi madre me decía lo mismo..."

"¿Era tan cabezota como tu?"

"Solo conmigo..."

La chica se marchó por un momento de su lado para coger un libro de texto. Lo abrió por una página y se lo mostró.

"¿Qué es esto?"

"Son las estrellas que descubrí"

"Oh... las que tienen nombres de comida..."

"Sí, esas..." - dijo algo disgustada por el comentario - "Mira esto..."

"Tiene... tiene forma de... ¿espárrago?"

"No, no es un espárrago"

"Oh, vale... con el ojo no distingo muy bien..."

"Oh, lo siento, no me acordaba"

"No pasa nada... solo me duele cuando respiro muy seguido o cuando mis órganos funcionan..."

"Eso no suena muy bien..."

"¿De los dos quién es el médico?"

"Ninguno"

"¿Y el experto en peleas?"

"Tú, pero has quedado para el arrastre"

"Cambiemos de conversación, por favor"

La buhita esbozó una leve sonrisa antes de levantarse y dejar el libro de texto donde estaba. En su lugar cogió un poco de zumo.

"¿Quieres un poco?"

"¿De qué es?" - preguntó con desconfianza

"Frutas del bosque"

"Antes muerto..."