Parte 288: Un cuaderno

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Tras pasarse por la cafetería de Fígaro, la enfermera Megan regresó a la consulta del doctor Herbert West, quien no estaba en su despacho.

Aprovechó para mirar los libros que este tenía en la estantería, fijándose en un cuaderno que había sobre su escritorio.

"Ese cuader..."

"Enfermera Megan..."

"Oh, Ayudante..." - se sobresaltó un poco - "Qué... silencioso..."

"........"

"No... no debería estar fisgoneando en el despacho de Herbert, ¿verdad?"

"........" - asintió con la cabeza

"Ya..."

"El doctor volverá en breve..."

"Sí, lo sé, lo sé..."

"Prepararé té... ¿quiere?"

"No hace falta, ya haré yo un poco"

"........"

El gorila se marchó, siendo que la lemur echó un último vistazo a la sala antes de irse a preparar el té. Le llevó algunos minutos.

Cuando acabó volvió a acercarse al despacho, hasta que la sorprendieron.

"¿Buscando algo? Megan"

"Oh, Herbert, yo..."

"Un poco de mala educación, ¿no?"

"Simplemente estaba... pensando..."

"¿Pensando? ¿Pensando en qué?"

"Recuerdas... ¿recuerdas cuando éramos niños?"

"Por supuesto que me acuerdo"

"Tu siempre decías que querías ser médico y que tendrías una oficina igual a esta"

"........"

¡Algún día seré médico! ¡Ya lo verás!

"Es imposible no recordar..."

Yo te arreglaré... lo prometo...

"Ese tipo de cosas..."

"A mi... a mi me ocurre algo extraño, Herbert..."

"¿Extraño? ¿A qué te refieres con algo extraño?"

"Recuerdo muy bien mi niñez, nuestra amistad, mis padres... pero a partir de cierta edad me cuesta recordar las cosas..."

"........"

"Hay algunas que voy recordando, pero..."

"........"

"Es como si fuesen borradores..."

"¿Te ha... ¿Te ha pasado algo hoy?"

"Bueno, me encontré con Posho, William y Konata... ellos solo me conocían como tu enfermera..."

"Sí, es lo que tiene que visite a Posho en lugar de hacer que venga"

"Pero... yo los conocía a ellos, ¿cómo es eso?"

Por un momento el mono se quedó en silencio, cosa que pareció llamar la atención de la lemur. Pero rápidamente se aclaró la garganta.

"Megan, ¿te tengo que recordar los expedientes?"

"¿Expedientes?"

"Sí, nada más llegar te enseñé los expedientes de todos los aldeanos"

"Eso... es cierto..."

"En ellos tengo adjuntas una fotografía de sus caras, así de fácil"

"Oh, tiene sentido..."

"De todos modos, ¿qué te atrajo a hablar con ellos?"

"Fue Posho quien me llamó, quería saber sobre ese pequeño juicio"

"Cierto, me llamaron como consultor"

"¿Qué opinas de eso de la muñeca embrujada?"

"En este pueblo pasan cosas muy extrañas, pero de ahí a una muñeca viviente..."

"Pensé que Posho se estaba medicando para no ser tan..."

"Impulsivo, hiperactivo, necio..."

"Eso último no parece haber cambiado"

"Ya... pero quizás es cierto lo que dicen, que no hay cura para la demencia..."

"Osea, crees que robó la muñeca"

"La ciencia ocasionalmente tiene respuestas para todo..."

"........"

"La lógica nos dice que no le dio tiempo de irse a la tienda y regresar con ella en el tiempo en que William estuvo fuera"

"Pero..."

"Pero también nos dice que una muñeca no debería estar viva"

"¿Alguna teoría?"

"Que quizás William es un cómplice"

"No me dio la impresión de que estuviese mintiendo"

"........"

"Pero bueno, es solo mi opinión"

La muchacha estuvo por irse antes de percatarse de nuevo en el cuaderno rojo que había sobre el escritorio del doctor.

"Herbert, ¿qué es ese cuaderno?"

"¿Cuaderno? Oh... eso..."

"Me suena bastante, como si lo hubiese visto en algún lado"

"Es mi libro de contabilidad"

"¿Contabilidad?"

"Por supuesto, te recuerdo que esto es alquilado"

"Oh, cierto..."

El mono espero a que se fuera para guardar el cuaderno en su cajón y cerrarlo con llave. Había sido muy imprudente al dejarlo ahí...

Animal Crossing: Fanfic Edition Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora