skinship ; renmin ✓

hyunin

Especial por los 1.17k de vistas
Si no quieren leerlo pueden saltarlo, no influye en la trama de la historia

Esto sucede un poco antes del capitulo titulado "soccer match"¡!

Desde que Renjun le había comentado a Jeongin que Hyunjin estaba interesado en él se dedicaba a observar las acciones del mayor estando solo a como estas se volvían torpes y lentas cuando él estaba presente.

Hyunjin era un príncipe de pies a cabeza. La manera en que sus cabellos azabaches se rizaban en sus orejas, el tono durazno que adquirían sus gruesos labios después de morderlos tanto durante un partido de soccer, el lunar debajo de su ojo era deslumbrante, su alta estatura que era tan ideal para alguien tan pequeñito como Jeongin eran detalles muy superficiales dignos de apreciar y que convertían a Hwang Hyunjin en un personaje digno de películas de realeza.

Pero sus sentimientos eran tan puros, su risa era pegajosa al igual que su comportamiento al estar con cachorritos o con Yang, su personalidad boba y encantadora hacían que el pelirrojo quisiera tomarlo en brazos y prometerle que todo estaría bien.

Todos y cada unos de los pequeños detalles hicieron que Yang Jeongin cayera enamorado por Hwang Hyunjin, tanto así que estaba dispuesto a arriesgar su dignidad por pedirle una cita después de que el mayor terminara con su entrenamiento.

El chico pelirrojo salió de su clase de trigonometría sintiéndose más ansioso que de costumbre, pero eso no lo detuvo de correr con pasos apresurados en dirección a la cancha de pasto sintético en donde los pertenecientes al equipo de soccer masculino practicaban, tenía la viva esperanza de ver a Hyunjin antes de que iniciaran la práctica, así tendría menos tiempo de pensar en las consecuencias.

Se recargó sobre sus rodillas para recuperar un poco de aire y sonrió en grande al ver dos cabelleras rosáceas y una azabache.

Chanhee, Jaemin y Hyunjin. Eran atractivos pero ver a Na era casi como un delito, Choi salía con un chico de otra escuela, y claro, los ojos de Yang estaban puestos sobre Hwang.

— ¡Hyunjin hyung!— el grito lejano de Jeongin llamó la atención de los tres chicos presentes en la cancha de fútbol.

Jaemin codeaba a Hyunjin con una sonrisa burlona, en cambio Chanhee empujaba su alta anatomía en su dirección, también riéndose por los nervios del azabache.

— Hola, Jeong— el mencionado sentía que estaba por desmayarse debido a la preciosa sonrisa que su hyung le ofrecía.

— Yo me preguntaba si quisieras ir a tomar café conmigo después del entrenamiento— el tono rosa apareció sutilmente en las mejillas del pelirrojo quién rezaba internamente por tener una respuesta positiva.

— Que vergüenza— puede sentir como el rostro del bajito decae y se nota sumamente triste después de escuchar su respuesta—, se supone que yo iba a dar el primer paso. Tenía incluso un plan todo estructurado para invitarte a salir.

— ¿Es un no?

— Es un sí— sonrió el mayor antes de permitirse acariciar las sedosas hebras rojizas del contrario—. Solo si aceptas salir conmigo el sábado.

Lleno de ilusión asiente el más bajito y se deja mimar por el azabache que se encuentra muy concentrado en la manera en que su grande mano se hunde en los cabellos pelirrojos del chico que le gusta.

— ¡Capitán Hwang!— el grito del pelirosa menor saca al nombrado de su ensoñación— ¿puedo irme?

— Corre y busca a tu sanguijuela— ríe el mayor agitando su mano libre, logrando sacar un sonrojo inconsciente en el pelirosa de apellido Na.

— No es una sanguijuela, es mi mejor amigo— se queja y se retira de ahí un par de pasos pero se ve detenido por un pequeño chino que se engancha a su torso con una gran sonrisa.

— Renjun hyung es una sanguijuela cuando se trata de Jaemin hyung— se burla el pelirrojo dejando salir una adorable risa nasal tan característica de él.

Sí, Hyunjin también estaba muy enamorado de su pequeño dongsaeng de cabellos rojizos.

— Creo que no habrá entrenamiento— murmuró extrañado el pelinegro observando la cancha de pasto vacía—, ¿Te parece si te llevo a mi café favorito?

Yang asiente con una sonrisa de oreja a oreja mostrando su ortodoncia casi finalizada.

— Deja de ser tan adorable— regañó el mayor con tono infantil acariciando las mejillas abultadas de Jeongin.

(...)

Entre risas tímidas, un café americano y una malteada de chocolate pasaron la tarde que estaba por dar inicio a una nueva historia llena de amor y confianza.

La manera en que Hyunjin tomaba torpemente la delicada mano derecha de Jeongin era una vista adorable y formaba parte de una memoria muy linda que recordarían un par de años más tarde cuando todo pareciera ir mal.

La sonrisa que salía de los finos labios de Yang era digna de ser fotografiada y expuesta en un museo de arte, Hyunjin estaba seguro de que su sonrisa podía iluminar hasta la noche más oscura y desolada.

Las bromas que hacía Hyunjin eran demasiado entretenidas y podían hacer reír a Jeongin hasta sentir que el aire faltaba en sus pulmones, era justo lo que necesitaba para sentirse menos tímido y más atraído hacia el azabache que le veía con ojitos brillantes.

— Me aterraba la idea de hablarte en un inicio— la sinceridad de las palabras del pelirrojo era más que obvia por su tono seguro y su postura—, creí que serías muy serio y reservado pero Renjun hyung fue demasiado insistente con el asunto de acercarme a ti, no me arrepiento de haberle hecho caso.

Se sonrieron con tanta honestidad que podían sentir como los demás desaparecían y solo ellos dos existían.

— Renjun fue un buen cupido— la voz de Hwang salió con un toque de burla, el solo recordar la manera en que Jaemin y Renjun le insistían en que hablara con el pelirrojo era divertido, intentaron hacer el papel de cupido cuando ni ellos mismos eran conscientes de sus sentimientos del uno por el otro—. No dejaba de insistir en que te mandara mensaje cuando obtuve tu número, nunca lo hice por miedo— ambos fueron cómodamente dejándose llevar por los tontos relatos de como aquella pareja de tontos amigos intentaron ayudar a que dieran un paso más en su amistad.

Después de mucho tiempo el destino decidió actuar, y fue exactamente el destino porque Huang y Na eran un desastre en persona y fallaron en su misión de juntarlos.

Esa misma tarde cuando el sol comenzaba a ocultarse en el horizonte sellaron una promesa de conocerse más y avanzar con pasitos de tortuga hacia una relación.

∆∆∆
Tuve un bloqueo mental con esta historia, aaaaaah
A esto le quedan un estimado de cinco capítulos más, haré lo posible por actualizar un poco más seguido este fic junto con short.

Btw, el hyunin me pone muy soft n.n