Mi mejor amiga lesbiana (Tom Felton y tu)

Ultimo capitulo

— ______, quiero hacerte mía... —susurró.
— Hazlo.
— ¿Estas segura? —preguntó dudoso recibiendo un asentimiento de cabeza como respuesta. Tom se removió un poco para colocar sus manos en ambas mejillas acercando su rostro al de ella para que lo mirara fijamente.— Escúchame, ______. Te amo, ¿de acuerdo? Nunca estuve enamorado de nadie antes, así que esta sería mi primera vez. Yo no quiero follarte, yo quiero hacerte el amor. ¿Bien? Una vez que este dentro tuyo no habrá vuelta atrás. Yo te perteneceré y tú a mí. Y necesito saber que eso es lo que quieres. ¿Es lo que quieres?

_____ miró a los ojos de Tom y lo beso sonriendo. Eso debía de haber sido lo más dulce que le habían dicho en toda su jodida vida.

— Claro que es lo que quiero. —Tom sonrió para tomarla entre sus brazos mientras ella reía.
— Dios, este día no podría ser mejor —dijo mientras subía las escaleras hasta su cuarto. Sería la primera vez que estaría con ______, la primera vez que haría el amor con alguna chica y no quería que fuera en el sofá de su casa, quería que fuera aún más intimo además de que su chica no se merecía una simple follada en el sofá.

Cuando llegaron al cuarto de Tom éste dejó a ______ sobre la cama tumbándola de espaldas con cuidado de no apoyarse mucho sobre ella.

— Eres la primera chica que entra a mi cuarto —dijo Tom cuando notó la mirada de curiosidad de ______ alrededor de todo el lugar.
— Eso tiene que significar algo ¿no?
— Más de lo que crees, cariño. —Tom depositó un beso en la nariz de _____ haciéndola sonreír— Esta vez será corta, ¿de acuerdo? Pero aún así me tomaré mi tiempo para poder disfrutarte.

_____ asintió nerviosa. Ya se sabía que no era su primera vez pero ahora era totalmente distinto a como lo había sido hace tiempo, pues ahora de verdad estaba enamorada. En esos tiempos creía haberlo estado equivocándose por completo porque ahora la sensación que sentía con Tom era totalmente distinta y aún más potente que cualquier otro sentimiento que alguna vez había sentido.

Tom la desvistió lentamente dándole pequeños besos a su piel cada vez que podía causando miles de escalofríos en su piel. Comenzó quitándole la remera, seguido de los shorts para luego quitarle el brasier y besar además de mordisquear sus pechos. Al final le quitó sus bragas negras dejándola completamente al desnudo frente a él. Tom recorrió con la mirada todo su cuerpo mientras ella sentía como la desvestía, pero no la vestimenta que no llevaba, sino la de su alma.

Tom pasó sus dedos acariciando toda su piel, desde su frente hasta sus pies disfrutando el tacto de su suavidad contra sus dedos. _____ era realmente la mujer más hermosa que alguna vez había visto, tenía un cuerpo para morirse y lo que la hacía más hermosa era que ni ella misma sabía lo que causaba sobre los hombres. Y toda ella le pertenecería, estaba ansioso por decir que ella es de su propiedad.

______, sin poder evitarlo, dirigió sus manos a los botones finales de la camisa de Tom y comenzó a desabrocharlos uno a uno causando que éste la mirara deteniendo su observación. Una vez que la camisa blanca estuvo fuera, ella acarició los abdominales y músculos que tenía alrededor de su cuerpo. Eran firmes, y deliciosos por lo que ella no aguanto las ganas de besar parte de su piel tal cual él había hecho con ella.

Ambos le quitaron los pantalones y bóxer quedando los dos desnudos. La erección de Tom logró sorprenderla pero no más que la mirada intensa que Tom le dirigía.

— ¿Pastillas o condón? —preguntó Tom sonriendo ante lo inoportuna que era su pregunta.
— Pastillas, te quiero disfrutar al máximo —respondió ella sonriendo.
— Perfecto, porque yo pensaba hacer lo mismo.

Tom se acomodó entre las piernas de _____ para luego dirigir una de sus manos hasta su mejilla y besarla mientras su miembro comenzaba a entrar en el sexo de su amada.

Luego de unos segundos comenzaron a moverse con más velocidad. Joder, ambos se sentían tan jodidamente bien. Como si pertenecieran al otro, como su lugar perfecto fuera el cuerpo del otro. Embestida tras embestida Tom besada la piel que más podía de _____ dejando más marcas mientras susurraba entre besos "mía, mía, solo mía" a lo que ella le respondía "solo tuya".

Minutos después el orgasmo llegó a sus cuerpos causando que ambos soltaran grandes gemidos entre ellos sus nombres.

Sus respiraciones agitadas era todo lo que se escuchaba en la habitación hasta que Tom se acomodó a un lado de la cama para poder abrazar a _____ de forma que su cabeza quedara en su pecho y su brazo alrededor de su hombro. Entrelazo sus dedos entre los suyos para comenzar a jugar con ellos.

Una vez que las respiraciones comenzaron a sonar más tranquilas, Tom besó la cabeza de _____ y se quedó en ese posición.

— Supieras cuanto espere por esto, cuanto sufrí por esto —susurró Tom.
— Supieras cuanto espere para besarte de nuevo, cuanto sufri cada vez que iba a la escuela y te veía pero no nos hablabamos.
— Esa fue la mayor de las torturas ¿no? Mirarnos y no hablar, callando todos nuestros sentimientos.
— Tom.... —ella levantó su cabeza para poder verlo de un mejor ángulo.
— ¿Sí?
— Te amo, en serio lo hago. No creí que me atrevería a amar otra vez y aquí estoy, amándote más que a nada.—él sonrió.
— Yo también te amo, y no prometo hacerte daño pues no sé que será de nosotros pero lo que sí puedo prometerte es que lo que siento hacía ti es verdadero.
— ¿Feliz? —preguntó _____ sonriendo.
— ¿Contigo? Siempre.

Tom bajó el rostro para poder besar los labios que esperaba seguir besando por el resto de sus días mientras que _____ disfrutaba de su cercanía como nunca antes lo había hecho, y desde ahora, no podría disfrutarlo menos.