El gran jefe [BL]

123

123: Niño oso

Mama Wang fue a la casa de los abuelos solo una hora. Cuando regresó, tenía una canasta de bambú en la mano. En la canasta había más de 20 pollitos recién nacidos. Fueron criados por la casa de los abuelos y se criaron desde hace casi dos meses. Ahora que era el momento adecuado y la abuela se enteró de que Mama Wang quería criar pollos, la dejó conseguir algunos hoy.

Los polluelos recién nacidos eran relativamente frágiles y necesitaban un buen cuidado. Cuando sus cuerpos eran más fuertes, no necesitaban gastar demasiada energía. Mama Wang también estaba relativamente inactiva en estos días, por lo que solo podía hacer esto.

Cuando regresó, Chu Yifeng no se había ido. Mama Wang no se sorprendió. Aproximadamente a las tres en punto, Wang Cheng le dijo que iba a la tienda de mermeladas con Chu Yifeng, y luego los dos se fueron.

En la tienda de mermeladas, Guan Jiahe y Guan Ying habían salido para la entrega desde la mañana. Cuando llegaron Wang Cheng y Chu Yifeng, acababan de regresar.

Con el aumento del pedido de mermeladas y otros productos secos, los dos ya no estaban tan ociosos como al principio. Tendrían que entregar casi todos los días, medio muertos a su regreso. Guan Jiahe se sentía cansado, y mucho menos Guan Ying. Todo su pequeño rostro no parecía tener energía en absoluto.

"Papá." Wang Cheng entró en la tienda. Papa Wang le devolvió la mirada. Tan pronto como estuvo a punto de hablar, vio a Chu Yifeng entrando detrás de él. "¿Por qué también vino Xiao Chu?"

"En camino", dijo Chu Yifeng. Frente a Papa Wang, no había necesidad de explicar demasiado. Lo creyó con una sola frase. Wang Cheng quería decir: 'Cambiaste tu antigua boca tan rápido. La última vez que lo llamó Sr. Chu, esta vez lo cambiará a Xiao Chu '. Lo más probable es que se debiera a él hablando con Mama Wang por teléfono.

Papa Wang se volvió hacia Guan Jiahe y le dijo: "Jiahe, tú y Guan Ying deberían irse a casa primero del trabajo. Como Chengcheng ya ha llegado, me basta con mirar la tienda con él. Corriste afuera durante todo el día y debes estar cansado, acostarse temprano en la noche ".

Al verlos a los dos vacilar, Wang Cheng dijo concisamente: "Papá tiene razón, primo, primero debes salir del trabajo".

Guan Jiahe bajó y se fue con Guan Ying.

Papa Wang saludó de inmediato a Chu Yifeng. Cuando llegaron los clientes, Wang Cheng tuvo que lidiar con ellos. Wang Cheng ya había aceptado su destino. Cada vez que Chu Yifeng estaba allí, su padre automáticamente ignoraba a su hijo y lo enviaba con los clientes. Wang Cheng sacó un papel del gabinete y encontré un bolígrafo grande, escribiendo un nuevo anuncio para reclutar empleados.

Planeaba contratar a dos empleados más, preferiblemente hombres. Daría prioridad a la conducción para que pudieran turnarse para dar a luz con su prima. Al principio, pensó con demasiada sencillez. No esperaba que su primo trabajara tan duro para mantener a su familia, no fue fácil para todos. Después de escribirlo, lo pegó en el exterior de la tienda con pegamento.

"Chengcheng, ¿qué estás publicando?" Papa Wang vio su movimiento y preguntó inquisitivamente.

"Anuncio de reclutamiento. Por cierto, papá, ¿qué pasa con ese estúpido cerdo? ¿Por qué no lo estás viendo?" Cuando Papa Wang vino por la mañana, también trajo el cerdo fragante.

"Debería estar en la tienda de baozi de al lado, ve a ver".

Wang Cheng se acercó y vio que estaba adentro, jugando con el dueño del hijo de cuatro años de la tienda baozi. Era pequeño, pero tenía mucha energía para jugar. Usó un bollo para atraer al cerdo, y luego tiró de la cuerda alrededor de su cuello. Lo soltó y trató de comer, como si fuera divertido verlo luchar con un melocotón.