El gran jefe [BL]

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101: Grandes empresas

Cuando Wang Cheng regresó a casa, la comida estaba lista. Mama Wang le pidió que se lavara las manos. La familia de tres se reunió alrededor de la mesa para cenar. Durante la comida, hablaron sobre algunas cosas que sucedieron durante el día. El amigo de Papa Wang ya se había ido después de recibir algunas muestras por la tarde. Para agradecerle, también le dio castañas y espinos. Su amigo no se demoró.

Después de comer, Mama Wang lavó los platos y salió a caminar con Papa Wang.

Wang Cheng regresó a la casa para limpiar brevemente. No regresó durante dos días y la mesa y las sillas estaban un poco polvorientas. Como Mama Wang estaba ocupada, no lo ayudó a limpiar recientemente.

Una hora después, los dos ancianos regresaron. Wang Cheng ya se había duchado y estaba sentado en la sala de estar. Mientras miraba la televisión, se secó el cabello que no tenía unos centímetros de largo. Papa Wang se acercó a echar un vistazo y dijo una palabra.

"La cabeza de mi hijo finalmente ha crecido". Aunque ahora parecía la cabeza de un erizo, debería mejorar cuando crezca.

Después de escuchar esta oración, la expresión de Wang Cheng se derrumbó de inmediato y miró con resentimiento a su querido padre, "Papá, la cabeza de tu hijo siempre ha estado creciendo". Qué gran error decirlo así, si no le creciera la cabeza, ¿podría seguir sentado allí?

Papá Wang parpadeó y, después de unos segundos, reaccionó y se dio cuenta de que había dicho algo incorrecto, riendo: "Mi boca estaba mal, el cabello es cabello".

Wang Cheng todavía estaba resentido.

Cuando Mama Wang salió de la cocina, vio al padre y al hijo, uno enfurruñado y el otro con expresión muda. Ella negó con la cabeza, ¿qué edad tenían?

La televisión estaba transmitiendo las noticias. Mama Wang sacó un plato de frutas de la cocina, todas las frutas se cortaron en rodajas y se insertaron algunos palillos de dientes. Estas fueron las manzanas silvestres que recién maduraron hace unos días. No se parecía mucho a una manzana, pero los colores eran mucho más brillantes, grandes y rojos. Todos eran salvajes, pero más dulces que las manzanas silvestres del mercado. En los dos días que estuvo fuera, las manzanas silvestres que acababa de colocar en la tienda se compraron.

Wang Cheng insertó un palillo en un trozo de manzano y de repente pensó en algo: "Mamá, escuché a la tía Guan San hablar de algo en la mañana y dijo que algo había sucedido en la casa del tío. ¿Sabes lo que pasó?"

Obviamente, Mama Wang había oído hablar de eso, su expresión se volvió débil, "Sabes, son tu primo y su novia, esa chica llamada Sally. Se separaron".

"Es Lisa." Wang Cheng agregó.

"Bueno, es solo el nombre. Se dice que los dos se separaron y no sé qué pasó. Tu primo se fue a casa y tuvo problemas con tu tío y tía. Todos, excepto tú, saben lo que pasó en estos dos días".

"¿Hay algo mas?" Wang Cheng miró a Mama Wang. Con el temperamento de la familia del tío mayor, definitivamente se quejarían de que su familia había causado que su prima y Lisa se separaran. Definitivamente dirían algo. Por la mañana, la expresión chismosa de la tía Guan San le mostró que las cosas no eran tan simples.

"¿Qué más puede pasar? Son todas cosas aburridas". Mama Wang realmente no quería decírselo.

Wang Cheng dijo: "¿La tía mayor le dijo a la gente en todas partes que dañamos a su familia?"

"¿Como supiste?" Papa Wang respondió. Mama Wang lo miró tan pronto como habló, y supo que había cometido un error, cerrando rápidamente la boca.