Y estando a centímetros de su rostro, se detuvo. Sonrió victorioso y le miró los labios.
-Haz lo que quieras.- Susurró
Puso sus manos alrededor de su cuello e hizo que sus labios rozaran.
-Haz lo que quieras.- Le respondió.
Ya no distinguían sus rostros. Estando tan cerca todo se volvía muy borroso. Solo sentían el leve roce de sus labios y la calidez de sus respiraciones.
Sabía que sus mejillas estaban sonrojadas y aunque el alcohol tenía cierta culpa, no era por eso.
Sabía que sus manos alrededor de su cintura no dudaría mucho en empujarla contra él.
Pero no sería el primero en lanzarse, sabía que ella tampoco y eso le causaba diversión. Un juego en el cual ninguno quería perder.Tranquilos, al final lo hicieron.
ESTÁS LEYENDO
Mini Historias Y Poemas
RandomAqui encontrarás un conjuntos de one-shots y pequeños poemas, cada uno con diferentes protagonitas, diferentes situaciones y problemas, diferentes sentimientos, diferentes mundos... Descúbrelos y diviértete leyendolos.