Capítulo 7 - Búsqueda

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La reacción de la capitana era inesperada, no iba a generar una pelea con ella.

Intenté calmarme para poder hablar y disculparme por querer usar mi supuesta autoridad que ya no tenía para hacer que se mantuviera en silencio, la luz que tenía en su mano comenzó a aumentar.

Apenas alcancé a ver como daba dos saltos impulsados por sus alas para sentir como me propinaba un contundente puñetazo en el abdomen que me hizo caer de rodillas.

—¿Qué está pasando aquí? — La voz de Janot se escuchó en medio de ambas.

—Creo que es bastante claro —, mantenía mi cabeza agachada conteniendo el dolor del golpe.

El teniente Janot que se encontraba en forma de luz volvió a su forma original, tomó mi mano para ayudarme a levantar mientras pedía explicaciones de lo que acababa de ocurrir.

Le dije que estábamos entrenando y la capitana se había pasado un poco con el golpe, de nada servía dejar ver las discusiones que pudiéramos tener, debíamos resolverlo entre ambas.

—Karle, lo siento, no debí golpearte así. — Se acercó tocando mi abdomen.

—No fue nada, he recibido peores golpes. — Comencé a reír terminando con lo tenso del ambiente.

—Me alegra que se estén divirtiendo, pero no es momento de estar jugando a las luchas, el mayor me pidió que viniera por ustedes. — Janot comenzó a empujarnos para hacernos salir.

—Espera ¿Qué mayor? —, preguntó Samay.

—El mayor Severecord ¿Qué otro mayor querría ver a un par como ustedes ahora? —, dijo Janot con tono de sarcasmo.

Janot nos contó como había sido ascendido de rango por desarrollar la habilidad de la «esencia vital» lo que lo hacía inmortal e inmune a los golpes por unos minutos.

Lo sé, todos podrían creer que los eónes son inmortales es una creencia extendida entre varias creaciones, eso también evita que muchos intenten enfrentarse a ellos.

La realidad es que tienen tiempo de miles de años hasta que el Gran Juez decía tomar su esencia para transformarla en una nueva creación, algunos han muerto en batallas, pero son muy pocos los registros de este acontecimiento.

Por eso se dirigen a algunas creaciones como «mortales», por su poco tiempo de vida, además de la necesidad de desprenderse de su cuerpo físico para renacer.

—Eres capitán segundo, a este pasó todos me superarán en rango. — Hice la semejanza de estar llorando.

—Los rangos no tienen tanta importancia, siempre resaltarás sin tener uno, el no ser un eón y poder estar en la dimensión central deja mucho que decir —, comentó Janot en forma de consuelo.

Al preferir ir caminando para adelantarnos en las historias que teníamos sin contar nos hizo demorar más tiempo al que seguramente el mayor quería.

Aproveché para mostrarle a Janot como la marca había variado su color, no mencionó nada al respecto solo me volvió a cubrir el antebrazo con la armadura que mantenía, mi ropa habitual de la dimensión central dejaría ver en todo su esplendor el sello.

Luego de más de dos horas de estar hablando sobre todo lo ocurrido llegamos al cuartel principal.

Me preocupaba que el sello tuviera alguna reacción que alertara a los eónes que se encontraban en la entrada del lugar, al pasar por el registro nada ocurrió, por lo que me mantuve más tranquila.

—El mayor Severecord los está esperando. — Un at - eón con aspecto envejecido nos indicaba el camino, ellos tenían la habilidad de tomar la forma que quisiere.

Este eón había preferido seguir una imagen de vejez a medida que pasaban los años, lo que los eónes tenían permitido hacer o no hacer, generaba bastante confusión.

Un palacio quedaría corto con lo hermoso que era este lugar, realmente cada edificio o estructura era tan perfecta que ninguna creación podría hacer algo como esto, las paredes cristalinas reflejaban las imágenes de los mejores guerreros de la dimensión central.

Pase evitando mirar la pared lateral a la puerta de la sala de juntas que pertenecía a nuestro equipo, ahí estuvo Neferet resaltando entre muchos, pero hoy solo era una pared de cristal vacía.

Debía entrar a hablar primero con el mayor, nos haría pasar a cada uno para hablar con nosotros.

En la sala solo se encontraba Severecord sentado mirando un mapa de todas las dimensiones que se reflejaba en la pared. —Mayor, estoy esperando sus órdenes —, él parecía no escucharme por lo que me acerqué, —¿Seve? —, el mayor se sobre salto lanzando un puño en forma de defensa que detuve con mi mano.

—Karle, discúlpame, he estado en modo alerta todo este tiempo, después de lo que te pasó no puedo estar tranquilo —, me dio un cálido abrazo que duro un rato.

—Hoy todos quieren golpearme —, mencioné en forma de broma, fui sincera con él contándole lo ocurrido con Samay, me escuchó en silencio y me aconsejó dejar en sus manos esa situación, él la convencería de no decir nada.

Le mostré lo que había ocurrido con el sello después de que Nefi fuera desterrada.

Estaba dudando en decirle que creía que ella lo había hecho, además, lo que me dijo no la haría quedar nada bien, al final decidí exponer toda la verdad para que la supiera.

—He visto esto antes, no recuerdo donde fue, tal vez no en esta dimensión, aunque no era exactamente igual al que tienes, era más extenso —, miré con expresión extrañada al Mayor, nunca había visto algo parecido

—¿Me estás diciendo que alguien más tiene la misma marca? ­— Pregunté. —No era un ser el que la tenía, estaba en alguna estructura, una pared o un montículo —. Ese lugar debía tener respuestas, debíamos hacer que Seve recordara donde la vio.

Por ahora tenía que esperar que explicara la razón de llamarnos, el esperar no es de mis situaciones favoritas.

—Quería decirte primero a ti, sé que compartes emociones con los humanos, que podrían verse afectadas con la misión que debemos cumplir —.

Seguro nos había incluido para ayudar en su castigo ¿Qué tipo de crueldad le enviarían a hacer para decirme eso?

—Mayor, no quiero ofenderlo, he estado en batallas y he terminado con la vida de muchos seres, no creo que una misión pueda afligirme —.

—Eso me hace entender que tengo tu aprobación para acompañarnos, no quiero ningún tipo de reclamo —.

Era la primera vez que me hablaba en esa forma, parecía una amonestación, me dio un poco de gracia.

—¿Por qué me preguntas solo a mí? —, aunque ya había explicado lo de mis emociones, ninguno estaba bajo su mando, —Ellos son onix, no pueden desobedecer una orden directa de los poderes —.

Severecord hizo pasar a Janot y Samay, —Todo lo que haremos se centra en encontrar las coordenadas de la dimensión del vacío —.

Le habían asignado como castigo ayudar Azrael con el transporte de los muertos en la dimensión terrenal para la posterior transformación de su esencia vital en nuevos seres.

Un repentino aumento en la mortalidad ocasionó la necesidad de asignar nuevos eónes al grupo de recolección, por lo que también agregaron a nuestro equipo a esta tarea, sin volver a unificarse oficialmente.

—¿Cómo se supone que eso nos va a ayudar a encontrar las coordenadas? ­No vamos a buscar a ningún Albi - z. —

—Paciencia Karlesti, paciencia — recalcó el mayor, —Le pedí al Gran Juez me asignara otras tareas con las dimensiones lejanas para que viera mi lealtad, nadie quiere ir a estas —.

Los poderes permitió que Seve liderara un reconocimiento en la dimensión del Fermio y otras dimensiones para reorganizarlas.

—Los escogí como mi equipo para las dos primeras misiones, además de Eleccti que ya está informado de todo —, en esa dimensión se encontraba el territorio de los Albi-z, fue una jugada sublime.

...

Gracias por leer. ~Erzebeth Bathory~

Hija De Guerreros 🛡️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora