Capitulo 15

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Cuando Bakugou regresó a su casa, Izuku estaba leyendo un libro en la sala de estar. No reaccionó ante el sonido de la puerta moviéndose, solo se dedicó a continuar con su lectura con una sonrisa de completa satisfacción.

—Deku. —Bakugou parecía aliviado por su sonrisa. Mirarlo disfrutar de algo fue como si hubiese tomado una profunda bocanada de aire fresco después de esos días que le parecieron más bien como una década. — Estoy de vuelta.

Izuku dejó suavemente sobre el sofá la sencilla colección de poesía clásica, y miró al hombre que estaba en la entrada sin mover ni un solo músculo. Bakugou tiene un gran ramo de tulipanes amarillos en las manos, sus ojos son profundos y también lucen cariñosos.

 Bakugou tiene un gran ramo de tulipanes amarillos en las manos, sus ojos son profundos y también lucen cariñosos

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Izuku dijo con una sonrisa:

—¿Son para mí? Son hermosas…

Se levantó para recoger las flores, y Katsuki le dio entonces un beso en la mejilla.

—Por supuesto, que son tuyos.

Izuku tomó el ramo, pero no pudo encontrar pronto un jarrón. Bakugou observó con una mirada tonta a Izuku, parado con su gran ramo de flores en medio de la casa. Incluso parecía que comenzaba a sentirse incómodo por la forma en que lo hacía.

—Kacchan ¿conoces el significado de estas flores?—el contrario permaneció en silencio—…Amor sin esperanzas…. (Nuestro amor…)

—No lo sabía—por un momento se sintió avergonzado, había comprado el primer ramo que vio en la florería. —… pero no hagas caso a esa tonterías Deku.

—Si… ¿No comes todavía?

Izuku se dirigió a la cocina, seguido de Katsuki. Comenzó a poner la mesa. Terminó teniendo dos platos frente a él. No podría resultarle menos apetecible.

Sabía que esta era la última cena que tendría con él, estaba tratando que sus emociones no se desbordaran

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Sabía que esta era la última cena que tendría con él, estaba tratando que sus emociones no se desbordaran. A decir verdad siente que cualquier cosa que ocurra hoy le podría afectar de por vida. Izuku por fin saco la botella de vino y la abrió. Coloco dos copas frente a él.

El intrépido gato que se enamoró Donde viven las historias. Descúbrelo ahora