Si le preguntaras a Jungkook su reacción a lo anterior, cosa que nadie haría si le viese aquella expresión impoluta e inalterable, lo más probable es que te diga que le daba lo mismo, que sus propias verdades nunca le han ofendido o asustado, así que aquella afirmación que iba totalmente por la línea no era un problema para digerir. Sin embargo, sus sentimientos era lo último que podía expresar, por lo que darse cuenta de que aquello le molestaba, le hacía sentir inconforme o que simplemente le dolía, era casi imposible.
No se consideraba un lastimero que vagaba por la vida dejando ver hasta cuando le dolía el dedo pequeño del pie, pero tampoco era alguien que se rehusaba a encarar sentimientos que tendrían repercusiones en su propio estado mental, porque Jungkook se tomaba todo a pecho, tanto lo mínimo como lo gigante, y se ofendía en silencio hasta con aquello que no pretendía llegarle con aquella intención.
Aquel ataque fue personal, como si se buscase darle de knock out sin él siquiera soltar el primer golpe, pero lo dejaría pasar incluso aunque estuviera inconforme y claramente afectado, porque se suponía que Jeon Jungkook era desvergonzado y nada le quitaba el sueño, así que haría pasar aquello como un asunto sin importancia aunque fuera totalmente lo contrario.
Se sintió rechazado y avergonzado por los claros intentos anteriores que pretendían parecer puro relajo, cuando en realidad estaba tanteando el terreno en búsqueda de saber si podría afectarle a Taehyung de alguna forma, positiva, de ser posible. Y que le molestaran aquellas palabras tan falsas como su expresión, solo significaba que estaba quedando en evidencia y el decir que no sabía cuan verídico era el sentimiento hacia aquel chico se estaba encaminando a parecer mentira.
No estaba involucrado con él lo suficiente como para decidir tan rápido que aquel dolorcito en su pecho era producto del desaire por parte de Taehyung, porque claramente podría ser aquel contador de rechazos anotando un puntito más. Anteriormente había estado al pendiente de Taehyung, aquel accidente de la dona fue su oportunidad para colarse en su vida, sin embargo, la percepción que tenía de él era distinta. No podía esperar más cuando tenía cientos de chismes falsos en su sombra, mismos que confirmaba por puro complacer a gente que al día siguiente le inventarían otro antecedente.
Cuando a las cinco de la tarde se cerró la biblioteca estudiantil, Jungkook dejó las llaves dentro de un zócalo de lámpara exterior que no tenía más utilidad que esconder aquellas llavecitas. Dio pasos pesados hacia su auto, mismo que le había regalado su tío en su cumpleaños dieciocho, con la única intención de irse a su casa con el plan fijo de sumergirse en la miseria que allí le esperaba, tan puntual como infaltable.
Jungkook, aunque probablemente tenía la capacidad y popularidad suficiente para estar rodeado de amigos, prefería mantener un círculo cerrado que se resumía en Yoongi, su único amigo y consejero. Le bastaba y sobraba con aquella presencia que le transmitía seguridad, confianza y calidez, con el único que se sentía comprendido y desconocía la soledad.
Cuando estuvo en el edificio del piso que había alquilado hace un tiempo, justo cuando decidió que seguir viviendo bajo el techo de su tío, con un primo que soportaba menos que cero, se volvería una molestia. Y justo en aquel pasillo que recorría a diario, se encontraba Yoongi, frente a su puerta, esperándole.
Jungkook no se sorprendió ante aquello porque no era algo de rara vez, ambos dormían juntos más de lo que podrían esperar.
— Hey — Jungkook le saludó cuando estuvo a unos pasos de él, haciendo que este levantara la vista del teléfono que acaparaba su atención —. ¿Qué haces aquí afuera?
Yoongi le miró con aquella cara que pretendía darle a entender que, como siempre, había olvidado la llave que Jungkook le había dado.
— Le cambiaste el pin de acceso, ¿verdad? — pero ambos sabían que aquello era una excusa para no admitir que, en realidad, también había olvidado la contraseña —. ¿Y esa cara larga?
ESTÁS LEYENDO
A Better Man ◆ [KookV].
FanfictionJeon Jungkook, sinónimo de arrogancia, narcisismo, atractivo y caliente, es el perfecto chico que tiene a jóvenes hormonales de ambos sexos a sus pies, experto en desechar después utilizarlos. Experto también en alterar al único chico que no sucumbe...