↪Harry Potter various Shit↩

Sirius Black #2

Narra Sirius

La lluvia caía sobre mis hombros y calaba mi cuerpo con un frío que llegaba hasta los huesos.
+Joder ya podría hacer más frío- musité sarcásticamente para mí mismo. Las calles estaban oscuras y no había ni un alma. Solo se escuchaba el goteo de la lluvia y algún que otro lejano ladrido de perro.
¿Dónde podía ir? No podía estar en la calle. Hacía demasiado frío para pasar la noche fuera... ¡Ya está!
Iría a casa de los Potter, ahí siempre me acogen... Mierda, la familia está de viaje. Se fueron también James y Lily así que imposible.
Dónde dónde dónde...? YA ESTÁ

En casa de T/N

El calor de la chimenea daba un carácter acogedor a tu hogar. Todo era muy distinto desde que tus padres te echaron de casa por seguir estudiando en Hogwarts. Mudarte sola había sido lo mejor que podrías haber hecho. Tu casa tus normas. Y lo mejor: tu casa tu magia.
Estabas a punto de sentarte en el sofá a leer mientras bebías un chocolate caliente cuando una horrible tormenta comenzó. Te levantaste para mirar a través de la ventana.
T/N: menos mal que no me ha pillado fuera, pobre al que le pase- dijiste en voz alta.
Solo era una tormenta, algo muy habitual, a leer. Te diste la vuelta y cogiste el libro. Al abrirlo una nota de entre sus páginas deslizó y cayó al suelo.
T/N: ¿Qué demonios?- preguntaste mientras cogías la nota del suelo y la abrías.
Era un papel pequeño y con dos tipos de letra. Una era desordenada pero a la vez bonita mientras que la otra era pequeña y redonda.

+ Me aburro T/N cuenta algo
T/N: pfffff no sé
+ ¿Qué me dices de un confesionario?
-De acuerdo, empieza
+ ¿Alguna vez has tenido novio?
-Que va jajajaja ni novio ni beso y ni siquiera ir de la mano con un chico
+ Me extraña
-¿Por qué?
+ Una chica como tú debería tener varios pretendientes

Aquí la nota terminaba.
T/N: ya me acuerdo- exclamaste.
Fue aquella vez que en pociones Sirius y tú hablasteis mientras os pasábais la nota. Justo después el profesor os pilló la nota y después de leerla en voz alta os castigó a los dos a limpiar la clase durante 1 semana.
Cumplir castigo con Sirius fue... Divertido?
Vale si, fue divertido. Estabas enfadada porque para ti un castigo era algo fuera de lo normal aunque en el fondo te gustó cumplir el castigo con él.
T/N: no me gustó, me encantó- susurraste acariciando el papel mientras recordabas lo mucho que reísteis durante el castigo.
En ese momento te diste cuenta de que querías a Sirius. No llegaban a ser amigos del alma pero solían quedar. Además, un día fuiste a estudiar con Remus a la biblioteca y Sirius estuvo celoso de él durante un tiempo. Mientras estudiaban, Remus te lanzó la indirecta de que Sirius se había fijado en ti.
Pero eso no podía ser, ¿Tú con uno de los chicos más guapos de Hogwarts? Imposible, eras una "don nadie"
Sirius tenía detrás a su propio club de fans locas que darían lo que fuera porque tan solo este les saludara o tan siquiera las mirara. Le querías pero él jamás se fijaría en ti, él estaba en otra liga.
Entonces escuchaste como alguien llamaba a tu puerta. Bajaste de la nube y... ¿Quién demonios podía ser? Era de noche y llovía a cántaros. No preguntaste quien era sino que cogiste tu varita y decidiste abrir sin pensarlo.
Al otro lado de la puerta estaba Sirius. El mismísimo Sirius Black.
T/N: Dios Sirius, entra rápido- dijiste desenfrenadamente mientras dejabas la varita en la mesa y le ayudabas a entrar.
S: Gracias T/N, gracias- contestó sonriendo mientras entraba.
T/N: Sirius, estás calado- dijiste mientras mirabas como su cabello mojado caía sobre su rostro. Levantaste la mano y apartaste un mechón de su rostro cuidadosamente- l-lo siento- te disculpaste.
S: no te preocupes T/N- contestó sonriendo mientras sus mejillas adquirían un tono rosáceo.
T/N: lo mejor será que te seques o te cambies de ropa Sirius, no me gustaría que te pusieras enfermo- cambiaste de tema rápidamente.
S: tienes razón T/N- compartió.
Le guiáste hasta el baño y le diste toallas para que se secara.
T/N: Sirius, no tengo ropa de hombre así que...- comenzaste.
S: me podría quedar en toalla, siempre y cuando no te importe ver este cuerpo serrano T/N- contestó al instante mientras reía.
T/N: que va por mí sin problema, si es por ti- contestaste riendo.
Unos 10 minutos después Sirius abrió la puerta y salió del baño. Estaba en toalla y maldición... Era terriblemente atractivo.
S: ya no parezco un perro mojado- bromeó.
T/N: claro- contestaste sin intentar mirarle demasiado. Un segundo más haciéndolo y tu corazón tomaría el control de la situación.
S: para empezar, perdona por presentarme de esta manera esta noche- se disculpó mientras se daba la vuelta y de la encimera del lavabo cogía un paquete de cigarrillos y sacaba uno.
T/N: no te preocupes, por cierto, ¿No están mojados?- preguntaste riendo y señalando el paquete.
S: que va, siempre los intento llevar bien guardados para evitar problemas- dijo con una sonrisa- es sagrado- añadió sin dejar de reír.
T/N: por cierto... ¿Qué te pasó para que tuvieras que venir así?- preguntaste. No era normal que alguien se presentará así a esas horas y haciendo el tiempo que hacía. Y menos si esa persona aparecía mientras más la echabas de menos durante las vacaciones. Mientras comenzabas a sentir el hilo rojo que les unía.
S: pelea con los padres, como siempre- dijo mientras encendía el cigarrillo- nada fuera de lo normal. Mi primera idea fue ir a casa de James, pero recordé que estaba fuera- añadió rascándose la frente- y después pensé en ti, es decir, que alomejor no te importaba- corrigió rápidamente para después dar una larga calada al cigarrillo.
T/N: claro que no me importa, te entiendo- te sinceraste.
S: ¿Me entiendes?- preguntó extrañado expulsando humo por la boca.
T/N: si, a mí, mis padres me echaron de casa después del cuarto año de estudios y tuve que buscarme la vida. No les gustaba que estudiara magia- dijiste cabizbaja- ellos piensan que eso es malo, que no puedo tener éxito en el mundo mágico- levantaste la mirada y te encontraste con sus preciosos ojos color ceniza. Tenían una mirada de comprensión y ternura. Era extraño, pero no por ello te gustaba menos.
S: mira, te voy a decir una cosa T/N- comenzó- tus padres no tienen ni idea de lo talentosa que eres, y si ellos no te animan a seguir aquí estoy yo dispuesto a dar guerra hasta que no pueda más- dijo de pronto- no te sonrojes mujer, solo es la verdad- añadió riendo mientras dejaba el cigarrillo consumido en el cenicero que le habías dado.
T/N: oye Sirius, gracias, de verdad- agradeciste.
Un silencio llenó la sala.

Narra Sirius.

"Lo siento Canuto pero te toca improvisar y salvar tu apestoso culo" dijo mi propia voz interior. Ese silencio se alargó durante un minuto hasta que decidí callar mi cabeza y seguir a mí corazón.

Me acerqué a T/N y miré su rostro. A pesar de haberlo observado millones de veces memoricé de nuevo cada detalle que lo hacía imperfectamente perfecto.
Mire sus ojos nerviosos, sus mejillas rosadas y su boca susurrando y anhelando sin decir palabra alguna: "hazlo"
Acaricie su mejilla y entonces la besé. Pero no fue un beso, no; aquello fue un ticket directo hacia el espacio, hacia las estrellas.
S: lo siento- me disculpé cuando me separé.
T/N: no lo sientas y terminemos lo que hemos empezado- susurró.
S: joder quien lo diría T/N, tan inocente que me parecías- dije riendo mientras ella me llenaba de besos.

A la mañana siguiente, narra Sirius

S: joder que dolor de cabeza- dije al despertar y ver cómo la luz se filtraba a través de la delgada cortina del cuarto de T/N.
Me levanté de la cama y fui al baño. En el suelo de la habitación estaba la ropa de T/N junto a la toalla que yo llevaba anoche. La llevaba hasta que los dos nos quedamos en ropa interior...
En el baño encendí un cigarro y pensé en la noche anterior.
T/N: buenos días Sirius, ¿Como están las musarañas?- preguntó recién despierta desde el marco de la puerta. Solo llevaba la ropa interior y el pelo suelto. Estaba preciosa
S: ¿Perdona?- pregunté confuso- ¿Qué musarañas?- añadí riendo.
T/N: pues que estás embobado- contestó riendo mientras se acercaba.
S: no que va, solo estaba pensando- aclaré dando una calada para luego soltar el humo como un dragón.
T/N: ¿Ah si? ¿Y se puede saber en qué pensabas?- siguió bromeando mientras se sentaba de un salto en la encimera del baño quedando a mí izquierda.
S: pues en que anoche me lo pasé genial, y no solo siento que fue un rato bueno, sino que eso será para siempre- confesé. T/N me llevaba llamando la atención desde 2 curso y ahora en 6 curso me había dado cuenta de que no podría ocultarlo más- puede que tenga decenas de chicas detrás de mí pero tú eres la única con la que quiero una historia- añadí susurrando con el cigarro en la comisura de la boca.
T/N se giró y me abrazó dulcemente poniendo la cabeza sobre mi hombro.
S: no se porque pero presiento que a partir de ahora se viene lo bueno- dije sonriendo como un bobo mientras le acariciaba el pelo y ambos reíamos.

No olviden hacerme saber si les gusto que así me animan a seguir 💕⭐
-Pucu💫🪐