¿Ya es demasiado tarde? I Juliantina Adaptación I Terminada

Flashback (Parte 2)

Juliana no había visto a Valentina durante toda la semana, la rubia no había asistido a clases y la morena no sabía exactamente como sentirse, la extrañaba muchísimo pero era consciente que la gota que derramó el vaso fue cuando Valentina faltó a su palabra, cuando no se presentó en el departamento, donde ella la estuvo esperando por horas, cuando ni siquiera le había enviado un mensaje para decirle que no iría, que la disculpe pero que no podía ir, eso le hubiera bastado, hubiera estado enojada, seguro, pero solo un mensaje hubiese sido necesario para que todo el presente fuese completamente diferente.

Por más que Juliana intentaba no pensar en Valentina era imposible, la rubia ocupaba sus pensamientos a todas horas, incluso se metía en sus sueños, ni siquiera allí podía escaparse de sus ojos, de su boca, de su voz, de toda ella, era frustrante, era frustrante porque quería olvidarla pero la recordaba todo el tiempo y ahora se encontraba demasiado preocupada pero no iba a mandarle algún mensaje, si ella misma le pidió que no la llamara, que no la buscara, que no quería saber de ella ¿Con qué cara le escribiría?

- Tierra llamando a Juliana. – Renata pasó su mano frente a la cara de Juliana intentando que esta salga de sus pensamientos.- La profesora.

- ¿Mmm?

- La profesora, Juliana. – Renata señalo hacia adelante y Juliana se encontró con su profesora mirándola con el ceño fruncido esperando que le dé una respuesta a una pregunta que ni había escuchado.

- Lo siento. – dijo la morena en un tono apenado.

- No sé que le sucede señorita Valdez pero por favor, preste más atención. – la morena asintió y suspiro cuando la profesora se alejó de ella y reformulo la pregunta para otro alumno.

El día paso muy lento, esa tarde tenían gimnasia, la clase que mas odiaba Juliana, lo único que la morena rogaba era que lloviera, era la única manera que la clase de gimnasia se suspenda, ya que las clases se dictaban al aire libre.

Al salir del establecimiento Juliana sonrío ampliamente, la lluvia era bastante intensa, podría ir a casa a descansar un par de horas al menos antes de ir a trabajar, lo único que rogaba era que esas horas en donde intentaría dormir, Valentina no apareciera para quitarle el poco sueño que tenía.

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Juliana había terminado de acomodar los artículos que habían llegado esa tarde, Mateo la miraba desde lejos, el hombre notaba que Juliana estaba demasiado diferente desde hace unos días, ya no sonreía, sus ojos no tenían ese brillo espectacular que solían tener, tampoco hablaba, más que algunos cordiales saludos a él o a la gente que debía atender, Juliana ya no era Juliana pero por más que le preguntaba, la pequeña morena, como él le decía, siempre terminaba diciendo que no pasaba nada, que solo estaba un poco cansada.

- Pequeña ¿Puedes quedarte para ayudarme a cerrar? – Juliana asintió – te pagare la hora extra.

- ¿Esto vale la hora extra? – Juliana le mostró un pequeño cuaderno de color rosa, con algunos dibujos en el, era pequeño en tamaño pero tenía una gran cantidad de hojas.

- Claro y esto también. – Mateo se giró y buscó dentro de uno de los cajones, sacando de él un pequeño estuche, dentro de este había una hermosa lapicera de pluma, de color plata, Mateo sonrió al notar el brillo en los ojos de la morena cuando la vio.

- Oh, es hermosa, Mateo. Pero creo que esto vale más que una semana de paga.

- Quiero regalártela, por tu buen trabajo. – el hombre le sonrió – aparte, necesitas una buena pluma para comenzar escribir ese cuaderno.