PROMESA (KOOKJIN) LIBRO #1

Arrepentido

Los cuatro chicos llegaron a la zona boscosa dónde acamparán por tres días, el lugar estába cerca del estanque de Anapji de Gyeongju, cómo es una zona turística también tienen muchos lugares que visitar y dónde comer. Por esa razón al rubio le parecío una buena opción, por si Seokjin se aburría del bosque ya tendría dónde llevarlo.

Escogieron un lugar que estaba rodeado solo por pocos árboles y en el cual el suelo estába más parejo y sin tantos bordes.
Taehyung y Jungkook terminaban de poner las piedras en círculo para la fogata mientras Jimin y Seokjin trataban de formar la segunda casa de campaña para dormir.

La primera les había costado algo de trabajo, Seokjin jamás había hecho ese tipo de cosas y las manos pequeñas de Jimin le impedían sujetar con fuerza la cuerda para hacer presión y así quedará armada correctamente.

—Esta nos está costando mucho trabajo —el castaño dejo por la paz la tela de la tienda fastidiado por no saber cómo es que deberían ir las varillas.

—No pusiste bien la varillas, por eso nos está costando trabajo. —Jimin tenía el ceño fruncido, le molestaba que el castaño fuera tan torpe y que se rindiera tan fácil dejándole todo el trabajo a el—. Hiciste lo mismo con la otra, por eso nos estamos tardando Jin.

—Es que nunca había hecho esto.

—¡Yo tampoco! —se levantó Jimin para responder soltando también la casa de campaña— ¡Mira! —señalo la tela enmarañada de la tienda— ¡Por eso no coinciden las entradas Jin!

El castaño se sonrojó y apenado ayudo de nuevo al ojigris para colocar correctamente la tela de la tienda.
Minutos más tarde Jimin había colocado correctamente las varillas y Seokjin sujetaba las cuerdas de la tienda con fuerza al suelo.

—¿Cómo van, con eso? —Taehyung llegó con su peculiar sonrisa dirigiéndose principalmente al castaño que estaba en cunclillas dándole la espalda, y Jimin le respondió en seguida al ver que Seokjin seguía en lo suyo.

—Pues con suerte no se nos caerán encima Taehyunnie —Jimin le sonrió y le enseño sus pequeñas mános rojas ya, con un puchero en los labios y Taehyung negó divertido— Para la próxima ustedes harán las dos cosas, y Jin y yo solo descansaremos, ¿Verdad Jin?

—Ajá —Murmuro. El castaño estába más concentrado en sujetar correctamente las sogas al suelo que en prestarles atención.
Al terminar se sonrió para el mismo y se levantó soltando un quejido por estar agachado un buen rato.

—¿Todo bien, Jinjin? —Taehyung lo tomo de la mano le dió un beso y después lo reviso— ¿No te lastimaste?

—No, pero si me fastidié —sonrió cansado y se dejó abrazar por el rubio— no sirvo para esto Tae

Jimin gruño y molesto rodó los ojos, a el también le había costado trabajo hacer las cosas y Taehyung solo se interesaba en Seokjin no le parecía justo y quería que el rubio también le abrazara.

Cuando quiso llamarle al rubio para que viera sus maltratadas manos, se escucho un ruido extraño de la tienda frente a el y fue sorprendió por una de las piquetas de la tienda golpeándolo con fuerza en su cara.

De nuevo Seokjin no clavo bien las piquetas de la tienda al suelo.

—¡AHH! —se quejo en dolor y llevo su mano a su mejilla— ¡¿Que fue eso?!

Taehyung soltó la mano de Seokjin y corrió preocupado hacia donde estaba el ojigris inclinado en dolor.

—¿Estás bien? Creo que te pego una piqueta Jimin —el ojigris se puso erguido y aún con dolor reflejado en su rostro abrazo de prisa al rubio frente a el— Haber, déjame ver