SKY | txt (en español)

TRES

— ¿quieres ir al festival de las estrellas? — esta es probablemente la linea mas larga que el castaño ha dicho desde su encuentro.

— ¿festival de las estrellas? — repite yeonjun mientras examina el póster en su mano.

— se mira interesante. — era la primera vez que hueningkai sugería ir a algún lugar, y su mirada afilada hizo la oferta difícil de rechazar.

soobin dio vuelta a la derecha, tan rápido que beomgyu, quién se durmió, golpeo su cabeza con la ventana. — entonces, vamos ahí. antes de que se haga tarde. — él dice, en la parte trasera voces aparecen quejándose de sus habilidades para conducir.

el viento frío rozo el cabello de taehyun, haciéndolo abrazar su chaqueta mas cerca a él mientras el grupo camina por el malecón. grupos de personas ya estaban ahí, esperando los eventos que vendrían.

con mucho ánimo camina hacia hueningkai, soobin sonríe mientras él mira el cielo cubierto. — anda, ¡ te tomaré una foto

antes de que el menor pudiera reaccionar, la cámara saca un pequeño chasquido, mientras soobin feliz sostiene el aparato para que él mire. — se mira bien, ¿verdad?

— está comenzando, ¡ oh dios mío ! — la voz de beomgyu resona, mientras desesperadamente yeonjun intenta callarlo para evitar miradas raras de los demás.

el par voltea para obtener un vistazo del brillo, luz amarilla sale en todas direcciones. de inmediato, el público comienza a moverse en un intento por tener una mejor vista de los fuegos artificiales.

¡ boom, boom ! los cielos rugían como chispas de una variedad de colores crujiendo en diferentes direcciones. era como una despedida - un día todos nosotros salimos y vamos a diferentes direcciones, ¿no lo hacemos?

absortos en sus propios pensamientos, los chicos se sentaron uno al lado del otro en silencio mientras las personas gritaban de vez en cuando.

— yo... — hueningkai sintió que alguien le jalaba su manga, por instinto se aparto.

— taehyun, ¿estás bien? — soobin lo mira preocupado, dándose cuenta de su palidez.

— no creo que esto sea lo mío, — él consigue exhalar, dándole una sonrisa de lado.

— hey, esta bien. no tenemos que verlo. — contesta hueningkai.

— podemos ir a caminar, ¿esta bien? es igual de lindo, confía en mí. — el fotógrafo atrae al chico del hombro. — vamos.

-

lejos del ruidoso lugar, taehyun sonríe disculpándose. — lo siento arruiné su noche.

— ¡ no digas eso ! — yeonjun lo regaña. — aquí también es muy lindo.

efectivamente lo era - el cielo cerúleo era como un lienzo, y las estrellas pequeñas eran como pintura blanca esparcida sobre él. — soobin, haz lo tuyo. — le recordó beomgyu mientras soobin asentía agradecido, grabando el momento.

— ¿estás seguro que estas bien? — pregunta beomgyu con detenimiento, inclinando su cabeza hacía el chico castaño.

— deja de decirlo como si casi hubiera muerto o algo así, — taehyun se ofende, — estoy bien.

— yo... yo solo estoy preocupado. — beomgyu levanta su cabeza hacia el cielo.

— ¿sobre qué? — él insiste.

— mi... nada. — el chico de cabello negro se traga sus palabras, los abraza el silencio.

-

— pareces ser muy cercano a yeonjun. —taehyun rompe el silencio insoportable mientras el chico a su lado mira desde la punta de su pie hacía arriba, saliendo de su trance.

— ¿qué?, ¿nosotros? hemos sido amigos desde los tres. — sonríe de oreja a oreja el chico peli negro, en una manera como si fuera su mayor orgullo en su vida. — y lo seremos para siempre. — él añade, ladeando su cabeza hacia arriba como si lo estuviera declarando al empíreo.

¿para siempre? taehyun se ríe entre dientes. era una promesa poco realista, sin duda. él sonríe para si mismo. pero esa certeza que desborda de cada una de sus palabras es hermosa, a pesar de todo.

— ¿amigos de la infancia, huh? — el chico menor pregunta en una actitud firme, — envidio.

ladea su cabeza como considerando algo, finalmente beomgyu habla más fuerte después de una pequeña pausa. — ¡ yo seré tu amigo !

el último suelta una risa. — ¿amigo?

— ¡ por siempre ! — notando la incredulidad en la cara de taehyun, beomgyu saca su su dedo meñique. — ¡ lo prometo !

suspirando en derrota, el chico mas bajo engancha su dedo con el del chico.

— para siempre.