Oscuras Decisiones

Capítulo #7:

Summer POV:

-Mierda-dije al décimo sonido de la alarma. Habíamos llegado ayer a Moscú pero pasamos durmiendo casi todo un día entero y David no nos había comentado un pequeño detalle ¡Comenzábamos clases al otro día osea hoy! Oh mal parido. Nos tenemos que quedar en un hotel hasta que nos vallamos a nuestra verdadera casa por la tarde.

La resignación llegó a mi así que me levanté de mi cama rápidamente sintiendo un pequeño mareo por lo que decidí tomarme una aspirina con agua. Aún no me han pasado los sucesos de aquella "pequeña" salida a la discoteca. Isabella estaba acostada a mi lado ya que era una cama matrimonial así que como sé que no se levantara fui al baño y llené un pequeño frasco de agua vaciandolo en su cara.

-Ya me iba a levantar, lo juro-dijo cayéndose al suelo. Me reí tan fuerte al ver lo sucedido que ella me lanzó una almohada y por mi mala suerte tiene muy buena puntería. Después de mirarme mal se lanzó de nuevo a la cama refunfuñando y giré los ojos.

Me fui al baño e hice mis necesidades una vez a dentro, l2ave mis dientes y me duché por aproximadamente 15 minutos. Al salir del baño busqué entre mis maletas hasta optar por unos shorts cortos con una blusa color crema que lleva un esqueleto blanco en el medio sin mangas y junto con eso unas vans negras.

Isabella ya se había metido a bañar y es seguro que pronto salga a cambiarse. Me cepille el cabello dejándolo suelto y luego me apliqué delineador y rímel negro en el rostro.

Me senté en la cama llamando a recepción para que después de unos minutos trajeran la comida e Isabella salió. Estaba vestida con unos shorts jean altos, un suéter grande negro con la palabra “I Fake” en blanco por la parte de adelante y unas vans azules, también cargaba el cabello suelto y el mismo tipo de maquillaje que siempre.

-¿Crees que tenemos que llevar algo?-pregunté una vez que ella llegó a sentarse en las dos sillas que habían para desayunar.

-Debes estar tan desesperada como para preguntarme-dijo Isabella divertida mientras masticaba fuertemente el cereal con leche. Lo hacía apropósito.

-Deja de comer así-dije revisando mi teléfono mientras me estremecía por el sonido chillante de sus dientes.

-Pero no estoy haciendo nada-dijo encogiéndose de hombros mientras abría la boca mostrándome toda su comida. Sabe que me fastidia, puta.

Terminé de comer y me levanté dispuesta a irme a la universidad, Isabella obviamente me siguió divertida y bajamos al garaje del hotel. Nos habían dado un par de “Lamborghini gallardo” e Isabella había elegido el negro y yo el blanco.

Conduje hasta la universidad y dentro de 20 minutos llegamos bajándonos del auto siendo observadas por alguno que otro adolescente hasta que incómodas comenzamos a caminar por el patio hasta que Isabella accidentalmente tropieza con algo bueno más bien alguien.

-Pero si es la del himen roto de la discoteca en Cancún-dijo Isabella riendo mientras llamaba la atención de ahora todos los que estaban ahí.

-¿Qué haces aquí? Creo que ya estoy empezando a odiar más los lunes-dijo aquella chica y sus dos amigas atrás de ella rieron mientras movían sus tetas alternadamente.

-¿Cómo puedes odiar los lunes? Tu vida es igual de miserable todos los días-dijo Isabella riendo en sus caras.

Ella movió su mano hacia la mejilla de Isabella pero ésta última la detuvo apretandola tan fuerte que la chica se fue llorando hacia el interior de la universidad mientras que los demás miraban a Isabella desconcertados pero más sorprendidos.

-Localicemos al hijo de Mark-dije mirando hacia todos los puntos de aquel establecimiento luego de ver hacía la chica llorona y puta.

-No leí lo que nos entregó David pero seguro es el típico nerd que eligió ser doctor para ayudar al mundo, lo que sé es que se llama James-dijo girando los ojos restándole importancia.