Oscuras Decisiones

Capítulo #6

Isabella POV:

Nos quedamos en la sala comiendo sándwiches preparados por mí, obviamente tengo dotes culinarias sobre cocina, me queda increíble el canguil y los sándwiches. Cuando terminamos de comer decidimos matar el tiempo viendo “Keeping up with the Kardashians”, programa el cuál odio pero me gusta criticar así que para mí es bueno.

-Ya es hora de irnos a cambiar-dijo Summer moviéndome. Mierda me quedé dormida.

Me levanté del sofá en él que estaba y corrí hacia el cuarto con Summer detrás, son las 7 de la noche y en 2 horas debíamos irnos, según David en esa estúpida fiesta tenemos que llevar vestido largo de gala o algo así.

-Me iré a bañar al baño del corredor, tu báñate en él de aquí-dijo Summer cogiendo sus pertenencias saliendo del cuarto.

Asentí y caminé hacia el baño de la habitación despojándome de mi ropa. Me metí en la ducha por 15 minutos y al salir me envolví en una toalla, luego de eso me coloqué ropa interior de encaje azul y la parte más difícil después de eso es el vestido; pasé muchos minutos decidiendo uno hasta que opté por uno que me gustó. El vestido es azul y largo hasta el piso con mangas largas, en la cintura tiene ajuste y por la parte de la espalda tiene un escote cruzado en x dejando ver piel hasta un poco más arriba del trasero.

Me sentí sumamente extraña pero aún así me lo coloqué junto con un collar de esmeraldas y unos pendientes del mismo que se encontraban en la pequeña cómoda; también me decidí por unos zapatos de plataforma negros de tacón alto. Antes de bajar me coloqué maquillaje voluminoso y por último en mi cabello hice ondas en las puntas, en realidad aquella chica reflejada en el espejo no soy yo, y eso es muy bueno.

Solté un gran suspiro y giré mi vista hacia el reloj viendo que son las 8:30 así que bajé las escaleras dispuesta a buscar a Summer.

-Summer-grité llamdnola mientras bajaba de las escaleras.

-Isabella estoy por acá-gritó Summer desde el patio. Caminé hacia ella y me asusté, no porque estuviera fea sino porque se ve bien y Summer para mí nunca se ve bien en los vestidos y más aún al ver que no se parecía en nada a la Summer de siempre.

El vestido de Summer es negro y largo hasta el piso, tiene mangas largas y ajuste en la cintura, la diferencia con el mío es que éste tiene escote pronunciado pero decente en la parte de atrás sujeto por una cadena de plata, junto con eso un collar plateado grande con pendientes a juego, unos tacones plateados altos de plataforma y por último su cabello se encuentra planchado, se ve realmente bien pero no se lo diré, lo guardaré para mí.

-Te ves terrible-dijo Summer al girarse.

-Tu igual-dije seria hasta oír como alguien tosía. Me giré y vi a David parado en el umbral de la casa.

-Sé que no lo digo a menudo pero me gusta cómo se ven, ya es hora de irnos-dijo mientras se retiraba.

Caminamos hasta una gran limosina. Marcus el chofer condujo por 30 minutos hasta llegar a “Maido” un restaurante muy lujoso. Entramos junto a David y mientras caminábamos a la mesa localicé dos sonrisas divertidas, putos Collins, los estoy viendo por todos lados.

Nos sentamos en la mesa junto con David saludando a muchas personas cuáles no me interesan pero aún así pude fijarme como era toda la decoración y cada cosa del lugar. Cada mesa tiene finos manteles con caros tragos, una gran pista llena de luces tenues de acuerdo al ambiente, en medio del salón hay unas lámparas en forma de araña con deslumbrantes detalles y junto con ello un estrado como él del juez de la cárcel, si es imposible olvidarlo.

Summer y yo conversamos hasta que noté como Sebastián movía su mano en forma de señal, dudamos por un momento pero pensándolo bien sería divertido charlar un rato así que nos levantamos pidiendo disculpas y llegamos a ellos.