Felix no podía creerlo, no sabía que pensar o sentir, pero su cuerpo sí actuó y se levantó de un salto de su asiento cuando vio la lanza perfectamente posicionada dentro del pequeño anillo.
El rey le sujetó el brazo y lo obligó a sentarse, pero no le dio una mirada de desaprobación como el príncipe esperaba, su padre observaba atentamente a Hyunjin y aquello le preocupó aun más. Esta vez su padre había sonreído, alfo fugaz pero Felix alcanzó a distinguirlo.
Cuando el público bajó sus revoluciones, Hyunjin hizo una reverencia hacia ellos y luego se volteó hacia el balcón en donde estaban Felix y sus padres, hizo otra reverencia más larga observándolos con elegancia. El rubio se encontraba muy confundido, su mejor amigo parecía más príncipe que él.
El rey le hizo señas a unos de sus guardias para que se acercara. Felix notó el gesto por el rabillo del ojo y puso atención, nervioso.
—¿De qué reino? —escuchó que preguntaba.
—Emerithe, su alteza. No tenemos comunicación con ese reino.
—Interesante.
El rey hizo otro gesto, indicándole al guardia que podía volver a su lugar y volvió su mirada hacia el torneo, sin mostrar ninguna pizca de sospecha, lo cual hizo que Felix volviera a respirar.
La competencia terminó con veinticinco ganadores.
—Como las verdaderas pruebas han empezado, desde ahora se les dará una pista al finalizar cada una de estas. Esperando que se preparen mejor para lo siguiente —dijo con su tono monótono el encargado del torneo en su discurso de cierre e indicó con la cabeza en modo de afirmación hacia un grupo de empleados —A todos los participantes se les está entregando un arco y flechas. Tienen una semana hasta la próxima prueba, gracias por su participación.
—Felicidades —le susurró Changbin a Hyunjin, mientras le pasaba las cosas. Hyunjin le sonrió, victorioso —Recuerda que tenemos una conversación pendiente.
Hyunjin le asintió, ahora algo intimidado y el castaño pasó al siguiente competidor.
Cuando dieron por terminada la jornada, la gente se disolvió hacia distintas partes del castillo, una gran parte se dirigió hacia el comedor y otro se quedaron en los alrededores.
Cuando Felix terminó los deberes que debía atender como príncipe luego de la competencia, dejó atrás a los guardias y sirvientes de la habitación en la que se encontraba y se dirigió hacia la habitación del mayor, esperando que se encontrara ahí y no tuviera que buscarlo por todo el castillo.
—Supongo que no me buscabas a mí —dijo Soobin, cuando se lo encontró saliendo de una habitación.
—No voy a mentirte —respondió el rubio, sonriéndole y apuntó el bolso que sostenía —Veo que lograste tu cometido.
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La Douleur Exquise | 𝑯𝒀𝑼𝑵𝑳𝑰𝑿
Romance❝La audiencia gritaba de emoción, los príncipes aumentaban su ego, los reyes aplaudían el espectáculo, pero el pequeño príncipe parecía confundido. No entendía por qué su mejor amigo, Hwang Hyunjin, siendo solo un plebeyo, se encontraba entre los co...